La Corte de Distrito del Condado de Travis, en Texas, EE. UU, decidió desestimar el cargo de homicidio contra la mexicana Rosa Estela Olvera Jiménez, fue sentenciada en 2003 a 99 años de prisión, acusada del homicidio, por ahogamiento, de un menor de edad.
Olvera Jiménez fue puesta en libertad 18 años después de haber sido encarcelada, ya que la jueza a cargo del caso consideró que no había delito que perseguir y que era inocente, con base en evidencia científica emitida por expertos que confirmaron reiteradamente que el incidente en el que falleció el menor de edad en realidad se había tratado de un accidente y no de un homicidio.
En el juicio original la Fiscalía de ese entonces presentó un testimonio erróneo que afirmaba que era físicamente imposible que el menor de edad se hubiera ahogado accidentalmente, razón por la cual fue encontrada culpable.
Esta exoneración se origina después de la decisión en mayo pasado de la Corte de Apelaciones de Texas, la cual anuló la condena original y dictaminó que la Fiscalía del estado había utilizado en su momento testimonios falsos para condenar a la mujer, por lo que el caso regresó a la Corte de Distrito de Travis para su revisión. Ya en esa instancia, la Fiscalía de Distrito decidió desestimar los cargos argumentando que en el proceso fueron considerados testimonios médicos falsos, por lo que la juez y la defensa aceptaron concluir el caso con la exoneración de los cargos.
En su intervención, la jueza Karen Sage pidió una disculpa pública a Olvera por la falla en el proceso penal que se siguió en su contra y que la mantuvo en prisión durante 18 años.
El gobierno mexicano anunció que la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través del Consulado General de México en Austin, continuará dando seguimiento al caso y a la situación de salud de la encarcelada por 18 años siendo que era inocente.