El Ministerio de Salud de Argentina informó que los casos de dengue superaron los 130.000 en la semana del 7 al 13 de agosto con un promedio de 281 contagios por cada 100.000 personas.
Desde el pasado 31 de julio se registraron 130.061 casos de dengue hasta la semana en curso, de los cuales 94% son autóctonos. La semana anterior se habían contabilizado 129.972 casos.
Sin embargo, el ente rector en materia sanitaria informó que la curva epidemiológica describió un descenso paulatino, aunque el acumulado de incidencias en la población general es de 281 casos por 100.000 habitantes.
Hasta ahora el numero de fallecidos se mantiene en 65, de los cuales 57% son mujeres y 43% hombres, con una media de 51 años de edad.
La presencia de la enfermedad se confirmó en 18 de las 24 jurisdicciones de Argentina, mientras que el reporte del ministerio de salud, agregó un apartado sobre la Chikungunya, una variación de la enfermedad, de la que se han registrado 2.303 casos en nueves provincias.
Por otra parte, un estudio científico reciente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) alertó sobre la presencia de mutaciones genéticas en los mosquitos Aedes aegypti en Argentina, que los hacen resistentes a dosis de insecticidas normalmente letales.
Las fumigaciones con insecticidas de tipo piretroides, aquellos que atacan una proteína ubicada en las membranas de las neuronas, a las cuales estimulan hasta provocarles parálisis o la muerte, ya no resultan iguales de efectivas para estos insectos porque han mutado.
Los científicos aseguran que con el dengue hay que estar atento a lo que sucede en los países vecinos del norte de Sudamérica, porque esta enfermedad es un problema regional. Sin embargo, nunca se había examinado lo que pasa en Argentina con respecto a la resistencia del vector a los insecticidas.
El pasado 26 de agosto se conmemoró el Día Internacional contra el Dengue, una enfermedad vírica que se transmite a las personas por la picadura de mosquitos infectados.