La amenaza que la Inteligencia Artificial (IA) le ha hecho creer a muchos que destruirá puestos de trabajo preocupa a millones de personas en todo el mundo.
Sin embargo, hay expertos que ven oportunidades laborales precisamente gracias al avance de la IA. Se han desarrollado nuevos espacios y al mismo tiempo se evoluciona en profesiones tradicionales en todos los sectores.
A continuación, te contamos cuáles son algunas de esas profesiones que han nacido de la Inteligencia Artificial.
1. Ingeniero de prompts
Es un experto en dar instrucciones a modelos lingüísticos de inteligencia artificial (por ejemplo, ChatGPT) y busca obtener el máximo rendimiento de la IA generativa.
El prompt engineer o ingeniero de prompts es la persona que diseña prompts, peticiones o premisas, para después someterlas a una herramienta de IA.
La clave para que la herramienta, ante la pregunta de un usuario, arroje el mejor resultado depende en gran medida de que el ingeniero prompt haya desarrollado unas instrucciones realmente eficaces (en forma de texto), en las que la precisión y el contexto son fundamentales.
En marzo, el Foro Económico Mundial lo incluyó en “3 empleos nuevos y emergentes”, mientras que Business Insider califica la ingeniería del prompt como uno de los hottest trabajos en IA generativa. El mismo adjetivo lo usan Forbes, “the hot new job”, y la Universidad Estatal de Arizona al presentar uno de sus cursos: “one of the hottest new jobs”.
En abril, la revista Time señalaba que para este tipo de trabajo no se necesitaba “un título en ingeniería informática, ni siquiera habilidades avanzadas de programación”.
2. Investigador de IA
Su rol es identificar maneras de usar la IA para superar problemas y limitaciones que tengan las organizaciones.
Se especializa en “comprender grandes conjuntos de datos y convertir ese aprendizaje en ideas y planes para desarrollar nuevas tecnologías de IA que los científicos de datos materializarán”, señala la Universidad de Leeds, en el artículo What are the Top 5 Jobs in AI? (¿Cuáles son los 5 trabajos top en IA?).
Un investigador de IA debe contar con lo que se conocen como habilidades blandas: aquellas que se relacionan con la inteligencia emocional, el pensamiento crítico, la resiliencia, la adaptabilidad, entre otras.
Son destrezas clave, dice la institución académica, porque su “rol implicará una tormenta de ideas frecuente para encontrar nuevos métodos y enfoques”.
En lo técnico, son importantes también las habilidades “matemáticas para utilizar estadísticas y predecir cómo se ejecutarán los programas de IA, y la capacidad de analizar datos con experiencia en herramientas como RapidMiner o SketchEngine”.
3. Experto en procesamiento de lenguaje natural
Es el experto humanista que domina los modelos lingüísticos y apoya al equipo de desarrollo de software con el procesamiento del lenguaje, dice la especialista.
Usualmente, se requiere una carrera de filología, lingüística o traducción e interpretación.
Y, aunque no se necesita de un conocimiento tecnológico profundo, una especialización en procesamiento de lenguaje natural o un máster en lingüística computacional, enriquece el perfil del candidato.
La lingüística computacional, que es un campo interdisciplinario que lleva décadas con nosotros, busca traducir a las máquinas la lógica del lenguaje escrito y hablado para que después, a través del entrenamiento de modelos, puedan ejecutar tareas.
Es así como detrás de los chatbots no sólo hay científicos de datos y desarrolladores de softwares, sino miembros de otras disciplinas humanistas, como la filosofía y la psicología.
4. Experto en automatización robótica de procesos o RPA (Robotic Process Automation)
Se trata de gestionar sistemas de software que automatizan tareas repetitivas y manuales en una empresa.
Para formarse en esto, hay varias licenciaturas como programación y sobre todo especializaciones relacionadas con la RPA.
Empresas como Microsoft asocian la adopción de la RPA, por parte de las organizaciones, con aumentos en la productividad.
“La RPA beneficia a su negocio al automatizar varias actividades, incluida la transferencia de datos, la actualización de perfiles de clientes, la entrada de datos, la gestión de inventario y otras tareas más complejas”, indica en su página web.
5. Auditor de algoritmos
Este trabajador revisa algoritmos de sistemas o aplicaciones para asegurarse de que carezcan de sesgos que discriminen a las personas por género, raza, edad.
Puede tener tanto una formación técnica (desarrollador de software, informático) como una preparación más humanista que profundice en la ética.
De hecho, los auditores de algoritmos deben tener una comprensión práctica de cómo los algoritmos pueden afectar a las personas.
6. Especialista en ética y leyes con conocimiento de la IA
“Independientemente de dónde te encuentres en la cadena de valor de IA, ya sea que produzcas tecnología, que la uses o que hagas contenido para entrenarla, es importante que tengas a tu lado a abogados y especialistas en ética que sepan de IA”, le dice a BBC Mundo Mathilde Pavis, profesora asociada de la escuela de Derecho de la Universidad de Reading, en Inglaterra.
“Eso te va a permitir asegurarte de que no estás haciendo algo que, más adelante, tenga que ser eliminado”.
Como especialista en derecho de propiedad intelectual, ética y nuevas tecnologías, Pavis también asesora a gobiernos, organizaciones y negocios sobre el impacto de la Inteligencia Artificial en el manejo de datos confidenciales.
Plantea que algunas de las principales preguntas que genera la IA son: ¿se violan los derechos de propiedad intelectual cuando es entrenada con información que está en internet o en las redes sociales? ¿Al hacer eso se atenta contra los derechos a la privacidad?
“Obviamente hay un potencial riesgo de que la tecnología que desarrolles sea mal utilizada por otros, aunque esa nunca haya sido tu intención”, advierte la profesora. Que se use, por ejemplo, para difundir información falsa, cometer fraudes, desestabilizar elecciones.
Como especialista en derecho de propiedad intelectual, ética y nuevas tecnologías, Pavis también asesora a gobiernos, organizaciones y negocios sobre el impacto de la Inteligencia Artificial en el manejo de datos confidenciales.