Este martes la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) hizo oficial la destitución del entrenador Jorge Vilda, tras una reunión sostenida en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas con el presidente interino de la institución Pedro Rocha.
Vilda deja el cargo luego de conquistar el Mundial Australia y Nueva Zelanda 2023 con la selección femenina de España. La destitución debía materializarse antes de la próxima convocatoria prevista para el viernes 15 de septiembre de cara a los partidos de la Nations League ante Suecia y Suiza.
El futuro del seleccionador español en la oncena femenil pendía de un hilo desde la semana pasada, tras la reunión de la Comisión de Presidentes Territoriales de la RFEF que llegó a la conclusión que su continuidad al frente de «La Roja» no era posible bajo ningún concepto.
Su supuesta presión para que Jenni Hermoso apareciera en el video de disculpa de Rubiales, y su apoyo explícito al expresidente de la RFEF, hicieron que los federativos tomaran la decisión.
Además, las 23 campeonas del mundo habian condicionado su continuidad en el equipo a la dimisión de los actuales dirigentes.
Vilda llevaba ocho años en el cargo y tenía un contrato hasta 2024 por US $171.000, que cobrará integros luego de su despido. Rubiales había anunciado la intención de cuadriplicar el contrato de Vilda por los logros obtenidos.
«He activado los mecanismos para que comience una negociación contigo en la que te invito a que te quedes con nosotros los próximos cuatro años cobrando medio millón de euros al año, te lo mereces», dijo Rubiales en la última asamblea de la RFEF.
En sustitución de Vilda, fue seleccionada Monste Tomé, ayudante en el ciclo del entrenador español, que se convertirá en la primera mujer en dirigir a la selección femenina de España.