Para saber realmente si el semen es de buena calidad se debe realizar un seminograma, espermiograma o espermograma, un estudio que evalúa la calidad del semen.
Sin embargo, en general, el semen es sano cuando su color varía entre el blanco y el gris opalescente, tiene un volumen mayor a 1.4 ml y una consistencia gelatinosa.
Las principales señales que alertan de algún problema son un volumen bajo de eyaculado y un color rojizo o amarillento, reseñó el portal cuidateplus.com.
Algunos estudios advierten que la calidad del esperma está bajando de forma preocupante: la concentración de espermatozoides en todos los hombres del mundo se ha reducido a la mitad de las últimas décadas.
«Que el color del semen cambie puede ser algo normal, ya que la comida que se ha ingerido recientemente influye en el color e incluso en la consistencia. También afectan cuánto tiempo ha pasado desde la última vez que se eyaculó y las actividades, explicó el doctor Juan Ignacio Martínez-Salamanca, coordinador del Grupo de Andrología de la Asociación Española de Urología.
Si el color del semen se ve muy blanquecino “demuestra una mayor concentración de espermatozoides y, por lo tanto, una mayor calidad seminal”, precisa el doctor Vicente Badajoz, director de laboratorio de Ginefiv.
Por el contrario, un semen transparente podría estar indicando que hay poca presencia de espermatozoides.
Si el semen adquiere un color rosa-rojo se debe a la presencia de sangre, algo que en términos médicos se conoce como hematospermia.
Martínez-Salamanca detalló que son varias las causas por las que puede ocurrir. Entre las más comunes se encuentran las inflamatorias e infecciones, ocasionadas por traumatismos genitales, infecciones de transmisión sexual e inflamación de la próstata.
Si el esperma es amarillo podría padecerse una infección de transmisión sexual, sobre todo gonorrea (se tiñe de amarillo-verdoso, especifica Martínez-Salamanca).
En cuanto al volumen, el doctor Martínez-Salamanca especifica que solo el 5-10% del semen proviene de los testículos y es el que contiene los espermatozoides. El resto del líquido seminal procede de las vesículas seminales y la próstata. El volumen normal, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), está en 1,4 ml.
La viscosidad también varía en una misma persona cuando eyacula varias veces al día. “Es más acuosa como consecuencia de un periodo de abstinencia muy corto”, aclara Martínez-Salamanca.