La pornografía no solo ha enjaulado la mayoría del erotismo actual sino que ha deformado el «ideal» físico y entre las nuevas tendencias están las intervenciones cosméticas a la vulva: disminución de labios y aclaramiento, básicamente.
No hay un patrón normal, coinciden los expertos. Que los labios sean más grandes o más pequeños, más simétricos o más asimétricos no es nada anormal, lo que pasa es que la mayoría de las vulvas no coinciden con la estética del porno. «Igual que el 90-60-90 para el cuerpo, el estereotipo ha llegado a los genitales”, explicó la ginecóloga Miriam Al Adib.
Haciendo juego al sistema machista de cosificación, la industria cosmética y la medicina impulsan tratamientos que prometen rejuvenecer la vulva o bien cambiar su aspecto.
Claro, la «normalidad» tiene un límite: la disfunción. «Por ejemplo, ante la existencia de una atrofia que impide disfrutar de las relaciones sexuales o si el labio exterior fuera excesivamente grande y entrara dentro de la vagina si hay penetración, eso sería un problema», señaló Al Adib.
La especialista pide diferenciar entre lo estético y lo funcional y critica que el mercado se lance a explotar las inseguridades de algunas mujeres.
Por ejemplo, la empresa Lico Cosmetics es una firma que comercializa en España y otros países, un sérum que promete reafirmar y aclarar la piel de la zona íntima femenina. Estefanía Ferrer es la CEO de la compañía y asegura que lanzaron el producto animados por la demanda de sus clientas.
Miriam Al Adid explicó también que con el paso del tiempo hay atrofia, «es un proceso natural en el que la piel y las mucosas se ponen más finas. Primero empieza la sequedad y luego la atrofia, es un proceso fisiológico, otra cosa es que ese proceso nos genere malestar. Si es a´si, hay que tratarlo».
“Hay un modelo infantil, el modelo del porno, y a día de hoy hay intereses económicos de la medicina vaginal estética o ginecoestética. No hay unas medidas de cómo es una vulva o vagina adecuada, no es real que haya una manera correcta, tenemos tantas vaginas como caras tenemos. Ese modelo que nos venden dice que nuestra vulva debe ser pequeñita, recogidita, que no sobresalgan los labios internos, que el color sea como el resto de la piel, pero es que es una zona que con el paso del tiempo se oscurece, por eso te venden incluso tratamientos blanqueadores”, explicó la fisioterapeuta Ariana Gaona.
