El Gobierno del presidente Vladimir Putin anunció que prohibió la exportación de trigo duro por seis meses –a partir del próximo 1 de diciembre– para garantizar la seguridad alimentaria del país, es decir, el mercado interno.
La medida también busca contener los precios al consumidor y asegurar stock en un momento geopolítico convulsionado en el mundo.
Por otro lado, también Moscú anunció la primera entrega de trigo «gratis» a los países africanos: serán beneficiados Somalia y Burkina Faso, según indicó el ministerio de Agricultura.
«Los dos primeros buques, de 25.000 toneladas cada uno, zarparon de puertos rusos. Esperamos su llegada entre finales de noviembre y principios de diciembre», declaró Dmitri Patrushev, citado por la agencia de prensa Interfax.
El ministro prometió que de aquí a fin de año zarparán otros buques cargados de trigo para Malí, Zimbabue, Eritrea y la República Centroafricana.
En total, Patrushev informó que Moscú enviará gratuitamente «hasta 200.000 toneladas de trigo ruso» a países africanos de aquí a Año Nuevo.