El director Técnico del equipo femenino de fútbol mexicano Necaxa, Jorge Gómez, es acusado de supuestamente condicionar la titularidad de sus jugadoras a favores sexuales.
Estás denuncias hacen crecer el escándalo la liga mexicana de fútbol femenino, especialmente después de que ya se hicieran acusaciones similares por parte de futbolistas de Chivas de Guadalajara y Cruz Azul.
De acuerdo con información difundida en redes sociales, el comportamiento de Gómez se habría extendido incluso a deportistas menores de edad, lo cual agrava la situación según las leyes del país azteca, reseñó el diario ABC de España.
Las jugadoras, junto con Rosa Romero, exauxiliar técnica del Necaxa, presentaron la denuncia. El semanario ‘Proceso’ informó que, al buscar apoyo en la directiva del equipo en Aguascalientes, la respuesta fue que Gómez «había salido muy coqueto». A pesar del escándalo, Gómez dirigió a su equipo en un amistoso contra Santos Laguna, donde lograron una victoria por 2-1.
Una de las deportistas, que prefirió mantenerse anónima, reveló a ‘Proceso’: «Mis compañeras subían las historias (en Instagram), donde se veía que él estaba con ellas y empezó a darle la titularidad a las jugadoras con las que salía, que eran entre cuatro a seis. Cuando ellas se equivocaban en alguna jugada del partido no les podíamos decir nada porque nos metíamos en un problema con él, ya que todo les justificaba y terminaba echándonos la culpa a nosotras».
El mes anterior, Romero ya había denunciado a Gómez por comentarios misóginos. A pesar de esto, la directiva no ha tomado medidas para removerlo o suspenderlo del cargo.
El club Necaxa emitió un comunicado en el que señaló: «Aunque hasta el momento no se ha presentado una denuncia formal, la institución ha iniciado la implementación de medidas preventivas de acuerdo al Protocolo en contra del Acoso y Hostigamiento Sexual y Discriminación de la Liga MX».
El 50% del Necaxa pertenece al empresario mexicano Ernesto Tinajero, quien también tiene intereses en España. La otra mitad del paquete accionarial está en manos de un grupo inversor que incluye a celebridades como Eva Longoria y Kate Upton, así como al ex campeón del mundo Mezut Ozil.
El fútbol femenino en México presenta dos realidades contradictorias. Aunque los equipos juegan en estadios modernos, los partidos se transmiten por televisión y los medios brindan más cobertura, las jugadoras ganan salarios que difícilmente les permiten vivir de su trabajo. Mientras que en el fútbol masculino es común que los jugadores tengan contratos millonarios, el salario promedio de las jugadoras mexicanas oscila entre 10,000 y 20,000 pesos mexicanos mensuales (menos de 1,077 dólares).
Esta situación hace que las deportistas sean vulnerables a diversos tipos de abusos, especialmente aquellas que provienen de hogares menos privilegiados. Actualmente, el Senado mexicano está discutiendo una ley para aumentar los salarios de las jugadoras.
En julio del año pasado, el entrenador del equipo femenino de Chivas de Guadalajara fue denunciado por llevar a un grupo de jugadoras a un bar de estilo ‘table dance’. En julio de este año, se conocieron casos de supuestos abusos en la selección mexicana sub-20, y en marzo pasado, Cruz Azul tuvo que despedir al director técnico de su equipo femenino por maltratos y insultos durante los partidos.
Con información de ABC de España