Según un estudio, el 77% de las especies de plantas que se describieron en el año 2020, están en un grado elevado de amenaza.
Esta cifra ha elevado la preocupación de los científicos, ya que estas especies son consideradas como los «ladrillos» de los ecosistemas.
Aunque los estudios más difundidos son los relacionados a la extinción de los animales, un hecho que ha sido descrito por la comunidad científica como la sexta extinción.
Aunque no todas las especies animales están en situación de vulnerabilidad, ya que la mayoría de las investigaciones se enfoca en los grandes grupos, como los mamíferos y las aves.
En el caso de las plantas, no existe un nivel de precisión porque sus extinciones están peor documentadas que la de los animales por la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza (UICN).
Sin embargo, se tiene mayor información de la extinción existente en determinados ecosistemas y países gracias a los informes de conservación.
Según el informe del Real Jardín Botánico de Kew Gardens, en Reino Unido, «State of the World’s Plants and Fungi» (Situación de las plantas y hongos en el mundo) cuanto más es la descripción de una especie, mayor es la situación de amenaza.
Por ejemplo, 77% de las especies que se describieron en 2020 están amenazadas, y en niveles elevados. Se calcula que un porcentaje de especies de plantas conservadas por un solo ejemplar en los herbarios, corresponden a especies ya extintas.
Hasta ahora se conocen 1,9 millones de especies y se calcula que las que existen son unos 8,7 millones. De ese 90% que queda por descubrir, es muy probable que un 77% esté amenazada.
Según los científicos, las plantas son los «ladrillos» del ecosistema, ya que son los productores primarios, y por lo tanto, se encuentran en la base de la piramide trófica del ecosistema.
En el caso de las especies dominantes como las palmeras de los bosques tropicales o las gramíneas en las praderas, su desaparición provocaría el derrumbe de estos ecosistemas.
El ejemplo más tangible es África, donde se cálcula que el 45% de las especies se extinguirán para 2085, y hasta el 97% verá reducido su rango de distribución.
En informe de Kew Gardens advierte que la extinción completa de estos géneros supondría la desaparición de líneas evolutivas únicas.
