Este viernes los ciudadanos iraníes se darán cita en las urnas electorales para elegir a los parlamentarios que ocuparán los 290 escaños de la Asamblea.
De acuerdo a la agencia estatal IRNA, 61 millones de iraníes fueron convocados a ejercer su derecho en los 60.000 colegios electorales, para elegir entre los 15.200 candidatos.
Además, se elegirán 144 clérigos y a 88 miembros de la Asamblea de Expertos, que se eligen cada ocho años y son los que escogen al líder supermo de la República Islámica en caso de vacante.
Los comicios durarán 10 horas desde las 18:00 (hora local), aunque las autoridades informaron que se permitirá la votación en los colegios donde haya electores formados después de esa hora.
El ayatolá Seyed Ali Jamenei, líder de la Revolución Islámica de Irán, fue uno de los primeros en ejercer su derecho al voto e hizo un llamado a todos los ciudadanos a acudir a las urnas «para ayudar a elegir un parlamento fuerte y reforzar el poder y la seguridad nacional del país».
Estas son las primeras votaciones tras las protestas que la muerte de Mahsa Amini desencadenó. En las últimas elecciones legislativas, celebradas en 2020, se registró un récord de baja participación del 43%, y los líderes temen que este año pueda ser inferior.
Estos comicios permitirán a la élite político-religiosa medir su popularidad en un contexto de crisis política, económica y social. Los resultados se conocerán el sábado 2 de marzo, y podrían mostrar un elevado abstencionismo.
«Tanto los amigos que aman al pueblo iraní, como los malvados, observan de cerca nuestro país y los asuntos de nuestra estimada nación. Presten atención a esto: hagan felices a los amigos y decepcionen a los malquerientes», dijo Jamenei en un mensaje a la nación.