El canónigo emérito de la Catedral de Valencia, Alfonso López Benito, asesinado en su casa, al parecer pagaba por sexo a jóvenes con problemas de adicción que en ocasiones dormían en su casa.
Así lo asegura el diario español ABC en un artículo, en el que señalan que a pesar del hermetismo que rodea el caso, esta hipótesis es estudiada por funcionarios de la Policía Nacional, quienes detuvieron a joven suramericano, sospechoso de ser el responsable de la muerte del religioso.
El examen post mortem confirmó que el religioso falleció por asfixia. Los agentes encargados del caso también imputan al detenido un cargo por robo, ya que sustrajo el teléfono móvil del difunto, desde el cual envió mensajes para suplantar su identidad y simular que seguía con vida.
La localización del teléfono y las declaraciones recopiladas por la Policía han sido cruciales para la detención, según informó el diario Levante.
De acuerdo con lo publicado por ABC, el canónigo solía alojar en su domicilio de la céntrica calle Avellanas de Valencia a jóvenes con dificultades económicas o de drogadicción, lo que generó quejas por parte de los vecinos. Incluso, desde el Arzobispado se le instó en algún momento a que cambiara su comportamiento, pero sin éxito.
La Policía sostiene la hipótesis de que el religioso llevaba a los jóvenes a su casa a cambio de dinero y, en ocasiones, con la intención de mantener relaciones sexuales con ellos. Hace dos años, surgió un conflicto cuando uno de ellos, de nacionalidad rumana, amenazó al religioso debido, aparentemente, a una deuda pendiente, refiere ABC.
Las investigaciones se mantienen bajo secreto sumarial mientras el Grupo de Homicidios de la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Valencia continúa indagando.
Según la Policía, la muerte del religioso ocurrió la madrugada del lunes al martes y fue causada por estrangulamiento con una almohada. El cadáver estaba en la cama con el pijama puesto. Aunque la casa estaba ordenada y limpia, sin indicios de robo, no se halló el móvil del sacerdote, desde el cual se envió un mensaje después de su fallecimiento.
El individuo detenido el miércoles como presunto autor del crimen está en dependencias policiales de Valencia, a la espera de comparecer ante la justicia. Según la investigación, el arrestado visitaba con regularidad la vivienda donde ocurrió el crimen e incluso habría pernoctado en el domicilio del religioso en más de una ocasión.
Hecho
Alfonso López Benito, de 80 años, fue encontrado muerto este martes en Valencia por el portero de su comunidad y un amigo. La Policía considera que, según los resultados de la autopsia, pudo haber fallecido dos días antes, y el autor del crimen trató de hacer creer que aún estaba vivo enviando mensajes desde su teléfono, anunciando un viaje.
La Policía investiga si alguno de los jóvenes que visitaba la residencia del canónigo de Valencia fue el responsable del asesinato. El religioso, nombrado canónigo de la Catedral en julio de 2015 bajo el arzobispado del cardenal Antonio Cañizares, se encontraba jubilado y ostentaba el título de canónigo emérito de la Seo.
Alfonso López Benito, doctor en Derecho Canónico y profesor universitario, obtuvo su doctorado en la Pontificia Universidad Lateranense de Roma y se destacó como experto en la historia de los mártires valencianos. Fue docente en el Instituto de Estudios Jurídicos de Valencia y en la facultad de Derecho Canónico de la Universidad Católica de la capital del Turia. Además, desempeñó funciones en el Tribunal Eclesiástico de la archidiócesis de Valencia.
El martes, el Arzobispado de Valencia emitió un comunicado informando que se enteró de la muerte del sacerdote a través de la Policía Nacional y los medios de comunicación, y se puso a disposición de las autoridades para colaborar en el esclarecimiento de los hechos.
Con información de ABC