La Fiscalía de Ecuador anunció que hay al menos nueve privados de libertad asesinados en enfrentamientos en el Centro de Privación Provisional de Libertad El Inca, ubicado en el norte de Quito.
Hasta el momento no ha trascendido mayor información oficial, sin embargo, desde hace un par de semanas las cárceles locales se han convertido en escenario de violentas masacres por el traslado de 1.002 reclusos de la Penitenciaría de Guayas.
Desde el año pasado la cifra de reclusos asesinados en Ecuador asciende a unos 400, según la propia Fiscalía.
También fuera de los recintos se desataron ataques a unidades policiales y centros de salud y coches bomba en gasolineras. Ya el Gobierno había ampliado el estado de excepción desde la semana pasada y se mantiene aún en tres provincias, con toque de queda entre las 9 de la noche y las 5 de la mañana.
“La estrategia de traslado de los cabecillas la mantuvimos a cabalidad. Este Gobierno no se doblega ante narcoterroristas: en este país no van a imponer su voluntad”, escribió la semana pasada el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso.
Las imágenes que compartió en su cuenta Twitter mostraron a presos sometidos, algunos de ellos todavía ensangrentados y a cabecillas de grupos armados en ropa interior siendo trasladados.