Como uno de los hechos más dantescos de la historia de México, que es necesario terminar de desentramar para que paguen los responsables, calificó el presidente del país, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), los resultados del informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia sobre el Caso Ayotzinapa.
El jefe de Estado señaló ese hecho como un “crimen de Estado”, por la desaparición de 43 estudiantes normalistas en la población de Iguala, estado de Guerrero.
El mandatario aseguró que la llamada “verdad histórica” que ocurrió durante la administración de Enrique Peña Nieto, es una vergüenza para el país, ya que no solo es evidencia de los horrores que cometieron con los normalistas desaparecidos, sino una asociación de autoridades, para forjar pruebas y fabricar mentiras a base de torturas, y otros métodos ilegales.
“Ventilar” la verdad
En una alocución pública, AMLO también apuntó en contra del exdirector de Investigación Criminal, Tomás Zerón, y exprocurador general, Jesús Murillo Karam, este último recientemente detenido por armar el caso, en el que aseguraban que los chicos habían sido entregados al crimen organizado, cuyos miembros los asesinaron, e incineraron en un basurero del municipio Cocula, para luego tirar las cenizas a un río cercano.
El presidente insistió en que es necesario “ventilar” los detalles del informe de la comisión, para que sean expuestos los responsables de “uno de los hechos más vergonzosos, lamentables, dolorosos” de la historia del país.
En parte de la alocución, AMLO proyectó las declaraciones del fiscal general, Alejandro Gertz Manero, durante un encuentro con los padres de las víctimas, en el que aseguró que “en Iguala el Ejecutivo Federal, en ese momento, intentó soslayar la responsabilidad del Estado mexicano ante un crimen desmesurado y brutal, y adjudicar la culpabilidad total a los alcaldes de Guerrero y sus policías como totalmente responsables”.
¿Y Peña Nieto?
Aunque se le preguntó sobre la responsabilidad del ex presidente Enrique Peña Nieto, López Obrador señaló que no hay orden de detención en contra de él: “se dice por ejemplo: Peña, sí. Pero el informe no solicita que se abra investigación o que se solicite orden de aprehensión contra Peña, pero sí contra otros” resaltó.
Igualmente los periodistas lo increparon sobre la supuesta participación de Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México (CDMX), quien había sido señalado por Murillo Karam como participante en la construcción de la “verdad histórica”, señalamiento que el funcionario había calificado de “absurdo”.
En relación al tema, el presidente insistió en que no es su deber señalar quién debe ser o no aprehendido, sino la justicia mexicana: “Si la Fiscalía o los jueces determinan que hay otros implicados, ellos lo van a decidir en absoluta libertad. Lo mismo si en las declaraciones de los implicados, presuntos responsables, aparecen nuevas versiones o más información. Todo eso se va a tomar en cuenta por los jueces” enfatizó.
AMLO pidió finalmente que se centre la atención también en los que ejecutaron la desaparición y muy probable asesinato de los 43 de Ayotzinapa, no solamente en los que construyeron el falso relato de la “verdad histórica”.
Hechos
El 26 de septiembre de 2014, un grupo de estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, tomaron secuestrados cinco autobuses privados, para acudir a una manifestación que se celebraría el 2 de octubre en Ciudad de México, con motivo del asesinato de más de 300 personas en la plaza de Tlatelolco en 1968 a manos del ejército.
En el camino, específicamente en Iguala, los jóvenes fueron interceptados por funcionarios policiales, y a partir de ese momento comenzó el caso de la “desaparición de los 43 de Ayotzinapa”, que aún no ha sido esclarecido del todo.
