Este miércoles el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), anunció que participará en una marcha en Ciudad de México para celebrar el cuarto año de “la cuarta transformación”, su programa de gobierno, así lo informó en su conferencia de prensa matutina.
"Nos vamos empezar a reunir a las 9:00 para que no nos pegué mucho el sol (…) Yo voy a marchar", informó el primer mandatario.
La manifestación será el próximo domingo 27 de noviembre desde el Monumento a la Independencia hasta la explanada del Zócalo, en Ciudad de México. En la concentración presentarán el cuarto informe de Gobierno trimestral "para ver si la gente está también contenta con la transformación, si vamos bien" indicó Lopez Obrador.
La presentación del informe tenía programada su presentación para el 1 de diciembre, pero se cambió para el 27 de noviembre “para integrar todos los eventos en un mismo día”. El 1 de diciembre es jueves y es una jornada laborable, por lo que se optó por modificar la fecha.
El eje central de la cuarta transformación hace alusión a un momento de cambio del sistema político que tiene como precedentes, según sus creadores, tres momentos históricos: la independencia, la reforma y la revolución.
La cuarta transformación se define en general por el cambio de régimen político, que contempla el cambio de la política económica que da fin al paradigma neoliberal de los gobiernos precedentes; las políticas sociales, el fin de la corrupción y la austeridad republicana.
La marcha también será en respuesta a las movilizaciones del domingo pasado a lo largo del territorio mexicano, en respaldo al Instituto Nacional Electoral (INE), por los intentos de reformar sus normativas por parte del presidente mexicano.
Este domingo 13 de noviembre, más de 50 asociaciones mexicanas marcharon en 26 ciudades del país en defensa del Instituto Nacional Electoral. López Obrador afirma que solo se va a transformar al INE, aunque un sector de la ciudadanía cree que será sustituido por una institución que, lejos de ser fortalecida, será debilitada.
Sin embargo, Lopez Obrador reconoce que es muy probable que su propuesta de reforma no sea aprobada porque requiere las ⅔ partes del congreso, apoyo que no lograrían sus aliados.
El presidente solo prodrá ejecutar por ley secundaria la reducción del presupuesto del INE y la regularización de los monederos electrónicos para evitar la compra de los votos.
