La organización de Amnistía Internacional advirtió a Estados Unidos que prohibir el aborto a nivel federal es una ‘’gran violación a los derechos humanos’’ luego de que un senador republicano propusiera vetar en todo el país norteamericano las interrupciones de embarazos a partir de la semana número 15.
"Que no haya ninguna duda. Esta iniciativa es una prohibición nacional del aborto. Si sale adelante, sería una gran violación de los derechos humanos, incluido el derecho a la vida, la salud, la autonomía corporal, la privacidad y la dignidad", dijo en un comunicado Tarah Demant, directora de Programas de Amnistía Internacional en Estados Unidos.
Demant no estuvo de acuerdo con la propuesta del senador Lindsey Graham, quien el pasado martes presentó un proyecto de ley federal que prohíbe el aborto tras la semana número 15 de gestación, ley que deberá ser cumplida en todo el país y que solo tiene excepciones para los casos de incesto, violación o peligro para la vida de la madre.
La representante de Amnistía denunció que Graham está "intentando hacer retroceder a Estados Unidos atacando los derechos" de las mujeres y niñas. "Seguir adelante con el embarazo es una decisión única de la persona embarazada y no de los políticos", reivindicó.
Este anuncio de la ley llega tres meses después que el Tribunal Supremo de Estados Unidos acabara con el derecho constitucional al aborto, vigente en el país desde 1973 con el caso Roe V. Wade.
Desde ese momento, algunos estados del país -mayormente gobernados por republicanos-, restringieron o prohibieron la interrupción voluntaria del embarazo, el último estado en hacerlo fue Virginia Occidental.
