Este lunes Arabia Saudita informó que ampliará su recorte voluntario de su producción petrolera en un millón de barriles diarios hasta agosto, así lo informó la agencia oficial Saudi SPA.
“La producción del reino para el mes de agosto de 2023 será de aproximadamente nueve millones de barriles por día”, dijo la SPA citando a una fuente oficial del Ministerio de Energía.
Esta decisión forma parte del recorte voluntario asumido por Arabia Saudita en abril, junto a otros países miembros de la OPEP+.
La reducción fue anunciada por la OPEP+ tras una reunión celebrada a comienzos del pasado mes de junio, cuando se produjo una caída de los precios del crudo.
Por su parte, Rusia también confirmó que recortará sus exportaciones de petróleo en 500.000 barriles, con el objetivo de presionar un alza en los precios del crudo.
«En el marco de los esfuerzos por mantener el equilibrio del mercado, Rusia recortará voluntariamente en agosto los suministros a los mercados petroleros en 500.000 barriles diarios mediante la reducción de las exportaciones», señala el comunicado oficial.
Sin embargo, los recortes los dos mayores productores no han afectado al precio del Brent, la principal referencia en Europa, que registró un alza de solo 1,3% en las primeras horas de la tarde.
“Si la tensión en el mercado no se materializa este mes, pensamos que 2023 puede convertirse en un año perdido para el mercado de crudo”, señalan en una nota los analistas de RBC Capital.
La OPEP+ que agrupa a los países miembros y a sus aliados, liderados por Rusia, bombea alrededor del 40% del crudo mundial.
