Australia implementó la ley de «derecho a desconectarse». Esta permite a los empleados ignorar mensajes y correos laborales fuera del horario sin temor a sanciones.
La normativa surge por la creciente intrusión laboral en la vida privada, especialmente durante la pandemia. La ley se aplica a empresas con más de 15 empleados.
Las multas por incumplimiento pueden llegar a 94.000 dólares australianos para las empresas y 19.000 dólares para empleados.
John Hopkins, de la Universidad Tecnológica de Swinburne, destacó la diferencia entre la era digital y el pasado. Antes, no había contacto laboral fuera del horario.
Impacto en los trabajadores
Una encuesta reveló que en 2023 los australianos trabajaron 281 horas adicionales no remuneradas. Esto equivale a un valor de 130.000 millones de dólares australianos.
La Comisión de Empleo Justo de Australia mediará cualquier disputa relacionada con esta ley. Las sanciones por incumplimiento pueden ser severas.
Debate y reacciones
El Grupo de la Industria Australiana expresó su preocupación por la aplicación de la norma. Temen que la ley pueda reducir la flexibilidad en el empleo.
Michele O’Neil, presidenta del Consejo Australiano de Sindicatos, apoya la ley. Asegura que busca evitar la explotación del tiempo personal de los trabajadores.
Rachel Abdelnour, trabajadora en publicidad, destacó la importancia de esta ley. Considera que ayudará a mantener un equilibrio saludable entre su vida laboral y personal.
Con información de Infobae
