El presidente estadounidense, Joe Biden, propuso un nuevo impuesto dirigido a los ricos para ayudar a financiar el programa Medicare y aseguró que el plan tiene como objetivo extender 25 años la solvencia del programa de seguros y brindar estabilidad a millones de adultos mayores.
Con esta ley, Biden declaró públicamente que los pudientes deben ahora cargar con un mayor peso fiscal, pidiendo a los que han tenido mejores resultados económicos que subsidien al resto de la población.
El presidente quiere aumentar la tasa fiscal de Medicare del 3,8% al 5% a aquellos ciudadanos que reciban más de 400.000 dólares al año, incluyendo salarios y ganancias de capital. Por su parte, ni Biden ni La Casa Blanca han proporcionado datos económicos con respecto a la propuesta, pero es probable que la medida aumente los ingresos fiscales en más de 117.000 millones de dólares de aquí a 10 años.
“Este modesto incremento en las contribuciones a Medicare de parte de aquellos con los mayores ingresos mantendrá al programa Medicare fuerte durante las próximas décadas”, escribió Biden el martes en un ensayo publicado por The New York Times.
La Cámara no lo aprueba
Sin embargo, la propuesta del mandatario chocó inmediatamente con la oposición en el Congreso, cuando el líder republicano del Senado, Mitch McConnell, señaló que esta idea nunca sería aprobada por la Cámara de Representante, que es controlada por los republicanos.
«Subidas masivas de impuestos, más gasto. Todo lo cual no verá la luz del día y el pueblo estadounidense puede agradecer a la Cámara republicana», alegó McConnell. ‘’Menos mal que la Cámara es republicana», defendió.
Aunque los demócratas del lado de Biden controlan al Senado, los republicanos son mayoría en la Cámara de Representantes.
El mandatario ha trabajado duramente para que los republicanos se unan a la idea para así recortar la financiación del programa de seguros para ancianos y discapacitados como parte de las negociaciones sobre el aumento de la deuda de EEUU, la cual subió a 31.4 billones de dólares.
Más de 65 millones de personas son dependientes del Medicare, el cual les cuesta a los contribuyentes aproximadamente 900.000 millones de dólares anuales. En este sentido, se prevé que el programa siga creciendo a medida que los ciudadanos envejecen.
Si la propuesta de Biden con respecto a los impuestos no es aprobada, el fondo Medicare no podría cubrir el 90% de los beneficios para 2028.