En medio de la crisis migratoria entre México y Estados Unidos (EEUU), el gobierno del presidente Joe Biden ordenó reforzar “de inmediato” el muro fronterizo con México.
La medida aplica especificamente en una de las áreas donde más se han registrado cruces irregulares de migrantes.
Las labores de construcción, que se llevarán a cabo en varias zonas del valle del río Bravo, incluirán la edificación tanto de barreras físicas como de vías para “prevenir la entrada” irregular de migrantes a territorio estadunidense.
Esta área fronteriza, al sureste de Texas, es la segunda zona donde se han registrado más detenciones de migrantes en los últimos meses, según datos de la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP, por sus siglas en inglés).
El documento emitido este jueves señala que entre octubre de 2022 y agosto de este año las autoridades estadunidenses han detenido a más de 245 mil personas intentando cruzar la frontera con México en esta zona.
Construcción en medio de leyes
La construcción no será un proceso aislado, para llevar a cabo las labores en el condado texano de Starr, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) se eximirá el cumplimiento de 26 leyes, incluyendo normativas referidas a protecciones ambientales, de salud pública y de conservación cultural.
Entre las leyes están las de Aire Limpio, Agua Potable Segura y Especies en Peligro, está fueron unas de las que el DHS dispensó con el fin de permitir la obra, la cual utilizará fondos que el Congreso asignó en 2019 para la construcción de un muro fronterizo.
Las dispensas ordenadas evitan perder tiempo en revisiones y demandas por la violación de leyes ambientales.
Rechazo a la medida
Aunque muchos están de acuerdo con la medida otros la han rechazado, una de ellas es la organización defensora del medioambiente Center for Biological Diversity, la cual aseguró que se trata de la primera vez que el gobierno demócrata usa su autoridad para saltarse leyes de este tipo.
El anuncio por parte del gobierno de Biden llega días después de que se conociera que las detenciones de migrantes intentando cruzar irregularmente la frontera sur aumentaron 36 por ciento en agosto, con más de 181 mil 059 arrestos.
En concreto, en el sector del valle del Río Bravo se produjeron 26 por ciento de esas detenciones, según datos de CBP analizados por la Oficina de Washington para Latinoamérica (WOLA, por sus siglas en inglés).
Este aumento se produce a pesar de la imposición de medidas más restrictivas al movimiento de personas en la frontera sur por parte del gobierno demócrata el pasado mayo, que limitan el acceso al asilo en territorio estadounidense.
Este aumento se produce a pesar de la imposición de medidas más restrictivas al movimiento de personas en la frontera sur por parte del gobierno demócrata el pasado mayo, que limitan el acceso al asilo en Estados Unidos.
La decisión de ayer contrasta con la postura del gobierno de Biden cuando emitió una proclama para poner fin a la obra el 20 de enero de 2021, señalando que “construir un enorme muro que abarque toda la frontera sur no es una solución política seria”, refiere EFE.