El intento de asesinato contra Donald Trump el pasado sábado, ha obligado al presidente de EEUU, Joe Biden, a modificar su estrategia de campaña, ya afectada por una débil actuación en el primer debate y especulaciones sobre su salud mental.
Perdiendo Foco en Trump
El ataque ocurrido en un evento de campaña en Butler, Pensilvania, ha impedido que Biden utilice su herramienta más efectiva: centrar la atención en el comportamiento de su rival y su agenda de segundo mandato.
Bloomberg señala que la violencia política ha obstaculizado los esfuerzos de Biden para defender su postura y amenaza con socavar una premisa central de su presidencia: restaurar la decencia y la normalidad en la política nacional.
Respuesta y Nueva Estrategia de Biden
Mensaje Unificador
Tras el incidente, Biden optará por un mensaje unificador que podría resonar más entre los votantes en tiempos de crisis. Según un funcionario de campaña, Biden planea instar al país a unirse y poner fin a la violencia política.
Entrevista y Declaraciones
El presidente reiterará su condena a la violencia política el lunes durante una entrevista en horario estelar con NBC News, y luego volverá a centrarse en exponer los contrastes entre su visión y la de Trump. Su equipo considera que el ataque en Pensilvania refuerza la tesis central de su campaña.
Condena y retórica política
Posición de Biden
A pesar de condenar el atentado contra Trump y cualquier tipo de violencia, recientemente el equipo de Biden describió a su oponente republicano como una «amenaza genuina» para el pueblo estadounidense, su libertad y democracia.
En una publicación en X el 28 de junio, Biden afirmó que Trump es «literalmente una amenaza para todo lo que representa EEUU»
Comentarios controversiales
Durante una conversación privada con donantes, Biden intentó desviar la atención de su desempeño en el debate afirmando que es «hora de poner a Trump en el punto de mira».
Aunque Biden nunca ha deseado explícitamente daños físicos a su adversario, esta frase ha dado motivos a los republicanos para acusar a la administración actual de incitar al odio contra Trump durante la campaña.
Con información de Bloomberg
