Tal y como se venía anunciado desde el gobierno del presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, este lunes se declaró al territorio indígena Yanomami como “libre de minería ilegal”.
La medida se tomó tras los resultados de los diversos operativos militares desplegados en los últimos meses contra los mineros ilegales, para poner fin a sus actividades ilícitas.
“El territorio Yanomami está libre de minería ilegal”, anunció el Ejecutivo. Según datos de la Policía Federal, las alertas por deforestación provocadas por la minería han disminuido drásticamente desde principios de año, hasta no registrarse ninguna en la primera quincena de este junio, refiere Telesur.
Es de recordar que una de las primeras medidas tras asumir el poder el presidente Lula, fue establecer el estado de emergencia sanitaria en las zonas Yanomamis, ubicadas entre los estados de Amazonas y Roraima, fronterizo con Venezuela, por crecientes casos mortales de malaria y desnutrición.
Desde que Lula anunció el rescate del espacio, responsabilizó del abandono de los yanomamis a los cuatro años de gestión del ultraderechista Jair Bolsonaro, quien fue defensor a ultranza de la minería y la explotación de madera en tierras indígenas, declararon fuentes cercanas a la Presidencia.
Según datos oficiales, 99 habitantes yanomamis de entre uno y cuatro años de edad murieron en 2022 como consecuencia de la desnutrición, las neumonías o diarreas vinculadas al avance «de la minería ilegal en la región”, gran contaminante de ríos y destructor de la selva amazónica, refiere Telesur.
El Gobierno brasileño movilizó fuerzas militares, policiales y paramédicos para revertir la crisis humanitaria entre los yanomamis y expulsar a los alrededor de 20.000 mineros ilegales que se estimaba que actuaban en la zona. En la acción se destruyeron campamentos clandestinos y se ocuparon embarcaciones y aeronaves que servían para esas actividades.
La reserva indígena Yanomami es un vasto territorio de casi 10 millones de hectáreas, donde viven unas 30.000 personas,.
