En medio del cambio en la política económica internacional que se plantea desde los países de latinoámerica, Brasil dio un paso al frente este lunes. El Banco Central lanzó un proyecto piloto destinado a implementar una criptomoneda.
Se trata de una versión «tokenizada» del real, la moneda corriente en el país, y que previsiblemente se pondrá a disposición del público a finales de 2024.
Lleva por nombre «real digital» y tiene una semejanza con el bitcóin. Según informó el Banco, facilitará las transacciones y será emitida por el mismo Banco Central con un valor igual al del papel moneda.
El proyecto piloto comenzó con la puesta en marcha de una plataforma para realizar transacciones simuladas de títulos públicos entre el Banco Central y un grupo reducido de instituciones financieras, que todavía no han sido seleccionadas, refiere EFE.
Sin embargo, este mecanismo estará en fase de prueba hasta noviembre de este año aproximadamente. En ese tiempo, estará abierto a eventuales modificaciones.
Los pro y los contra
En una rueda de prensa, el coordinador del proyecto, Fábio Araújo, afirmó que el real digital tiene la capacidad de promover una «alteración profunda del mercado financiero» y, por ello, todos los bancos centrales del mundo «están muy interesados» en el desarrollo de herramientas similares, afirma EFE.
Con esta herramienta, se pretende promover un mayor nivel de inclusión financiera al abaratar las transacciones. Además se busca democratizar herramientas de inversión, crédito y seguros.
El Banco Central explicó en un documento todas las directrices del proyecto, y detalló que cualquier organismo puede consultar el proceso.
Además, en ese documento constata que el uso de criptomonedas presenta una tendencia creciente en el mercado y señala que, por la falta de una moneda respaldada por el emisor, las instituciones se han visto forzadas hasta ahora a usar las llamadas «stablecoins».