El gobierno de Brasil anunció que reanudará las importaciones de electricidad de Venezuela, tras más de cuatro años de interrupción.
El anuncio lo hizo el Ministerio de Energía y Minas brasileño y la empresa energética Ambar, quien es el brazo energético de J&F Investimentos, propiedad de los empresarios Joesley y Wesley Batista.
Según refiere RT, la empresa acordó con el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva que los consumidores paguen entre 900 y 1.080 reales por MWh (megavatio-hora), dependiendo de la cantidad importada.
Se espera que esta medida reduzca los costes de la energía para los consumidores del estado brasileño de Roraima, el único del país que no está conectado a la red nacional.
De igual forma, el proveedor de las importaciones brasileñas será el mismo, la central hidroeléctrica Simón Bolívar, también conocida como ‘Guri’, que tiene actualmente 10.200 MW de potencia y está entre las mayores del mundo.
Ambar señaló que estructuró una operación comercial para viabilizar el negocio, presentando una nueva alternativa para reducir la cuenta de la luz de los brasileños y descarbonizar la matriz energética, señala RT.
«La energía está siendo ofrecida por Ambar a un costo promedio 50% inferior al precio que actualmente pagan los consumidores para abastecer al estado de Roraima», indicó.