Este martes el condado de San Diego en California, EEUU, declaró una crisis humanitaria después de que las autoridades fronterizas liberaran en las calles a unos 8.000 solicitantes de asilo sin ninguna asistencia.
La Patrulla Fronteriza ha llevado a grupos de migrantes a las ciudades de San Diego, Oceanside y El Cajón, mientras que a otros los dejaron en la estación del sistema Trolley de transporte.
A raíz de la llegada de numerosos migrantes, la Junta de Supervisores del condado de San Diego declaró por unanimidad la emergencia y solicitó al gobierno federal, hacerse cargo para atender a los solicitantes de asilo.
De acuerdo a las autoridades locales, más de 8.100 inmigrantes han sido dejados en la región en las últimas dos semanas, una tendencia que no muestra signos de desaceleración.
Algunos de los migrantes han sido apoyados por sus patrocinadores, que se harán cargo de ellas y de sus gastos mientras gestionan sus solicitudes de asilo, sin embargo, muchas familias permanecen días a la intemperie.
En los últimos días la frontera entre México y EEUU, ha experimentado una ola masiva de migrantes que ha colapsado ciudades como California, Texas y Arizona, que obligó al gobierno mexicano a asumir el compromiso con el gobierno estadounidense de deportarlos en su territorio.
De hehco, la Patrulla Fronteriza informó a organizaciones civiles que habían comenzado a dejar grupos de personas en las calles para despejar sus instalaciones, que estaban colapsadas.
La Junta de San Diego le pidió al gobierno que le asigne recursos y personal para ayudar a los solicitantes de asilo y llevarlos con sus patrocinadores y destinos finales para evitar las liberaciones a la intemperie.
El condado enviará una misiva al gobierno federal con los detalles de las necesidades específicas de las ONG locales y de la comunidad afectada.