El enigmático caso de Rudy Farías, reportado como desaparecido en 2015, ha dado un sorprendente giro después de la intervención del activista Quanell X en Houston.
Según el Texas Center for the Missing, el joven hispano de 23 años fue encontrado después de ocho años, pero no se han revelado detalles sobre cómo ni cuándo apareció.
Las primeras pistas sobre la verdad detrás de la desaparición de Rudy surgieron cuando él y su madre se encontraron con detectives de la Policía de Houston en un hotel, en presencia de Quanell X.
Durante el encuentro, Rudy confesó a los detectives que nunca estuvo desaparecido, sino que había estado cautivo en la casa de su madre, Janie Santana.
Según Quanell X, la madre de Rudy admitió ante la policía que lo mantuvo prisionero en su propio hogar. Durante años, Rudy fue sometido a abusos sexuales y le suministraron drogas. Además, madre e hijo solían dormir juntos desnudos y ella le exigía comportarse como «un padre».
Durante los ocho años que Rudy estuvo cautivo en la casa de su madre, su familia no tuvo contacto con él. Incluso en 2020, cuando la abuela de Rudy lo vió en la casa de su madre y lo informó, nadie le creyó debido a la creencia de que estaba desaparecido.
Rudy también reveló que su madre lo amenazaba constantemente, diciéndole que si decía algo o intentaba escapar, la policía lo encarcelaría, según informó Univisión.
El día en que Rudy supuestamente apareció en una iglesia del vecindario East End de Houston, en realidad había logrado escapar de su casa.