El presidente de Perú, Pedro Castillo, fue notificado de una nueva investigación penal en su país, lo que calificó como una “evidente confabulación”, en su contra.
Esta sería la tercera investigación abierta por la fiscal general, Patricia Benavides contra el presidente Castillo en menos de un mes y la sexta en menos de un año.
Según el argumento de la Fiscalía, esta vez la investigación es por el presunto delito contra la tranquilidad pública, en la modalidad de organización criminal.
“El objeto de la investigación está referido a las obras adjudicadas en las provincias de Chota-Cajamarca y Cajatambo-Lima”, informó el Ministerio Público en su cuenta de Twitter.
Además, están bajo pesquisa el ministro de vivienda, Geiner Alvarado y el alcalde de Anguía, José Nenil Medina Guerrero, detenido previamente en Lima y señalado como uno de los “operadores políticos del presidente”, de acuerdo con medios locales.
Desde hace días, Castillo, viene denunciando un plan político en su contra, luego de que el pasado lunes se allanara el Palacio de Gobierno en busca de su cuñada Yanifer Paredes.
Ante esta denuncia, la fiscal general, Patricia Benavides, dijo este jueves antes de anunciar la medida, que su oficina no estaba involucrada en plan político alguno contra el mandatario.
Sin embargo, Castillo denuncióque mientras el Congreso presentaba un informe para inhabilitarlo, el Ministerio Público montaba un notorio espectáculo para allanar su residencia con el objetivo de desestabilizar el orden democrático en la nación.
La fiscal argumentó la necesidad de “perseguir el delito, caiga quien caiga y pese a quien le pese”, después de las palabras de Castillo.
Las acusaciones públicas y mutuas, incluyen cuestionamientos a Benavides por la decisión de sustituir a la fiscal suprema Bersabeth Revilla, quien investigaba a la jueza Emma Benavides, su hermana, por presunta implicación en la liberación de narcotraficantes entre 2012 y 2015 a cambio de sobornos.
Recientemente el Congreso de Perú divulgó un informe en el que recomienda procesar política y penalmente a Castillo, pues habría incurrido en traición a la Patria al considerar un posible referendo popular sobre otorgar una salida al mar a Bolivia.