Este miércoles el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de Chile, anunció el inicio del Plan Nacional de Búsqueda de los Detenidos Desaparecidos durante la dictadura de Augusto Pinochet.
«Es una forma de reparación no solo hacia las familias de las víctimas, sino también a la sociedad» aseguró Luis Cordero Vega, ministro de Justicia y Derechos Humanos, durante un encuentro con corresponsales de prensa internacional.
El plan comenzará con la integración del trabajo de las comisiones de la verdad, los tribunales de justivia, los gobiernos anteriores y los familiares de las víctimas.
Uno de los objetivos del plan es conocer las condiciones y circunstancias en las que ocurrieron las detenciones y desapariciones forzadas a lo largo del régimen dictatorial de Pinochet.
«El plan no sustituirá la tarea de los tribunales y, para que funcione, es importante contar con la colaboración de los familiares de víctimas y sus agrupaciones», señaló Cordero.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, encabezará la ceremonia oficial en la Plaza de la Constitución en Santiago de Chile, que coincidirá con la conmemoración del Día Internacional de las Víctimas de Desaparecidos Forzadas.
«El Gobierno ha tratado de hacer un esfuerzo genuino por tratar de buscar un espacio de compromiso hacia el futuro en torno a los 50 años, que es lo que ha convocado el presidente de la República», apuntó el ministro.
La iniciativa se lanzará el 30 de agosto, cuando Boric firme un decreto supremo el Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, a propósito de los 50 años del golpe de Estado de Augusto Pinochet que derrocó al presidente Salvador Allende.
Hasta el 11 de septiembre de 2022, aún no se había esclarecido el paradero de lo más de 1.192 presos desaparecidos por la dictadura de Pinochet.
La represión en la dictadura chile dejó un saldo de más de 3.200 asesinadas o desaparecidas durante los 17 años de dictadura militar. Actualmente cientos de familias desconocen todavía el paradero de sus familiares.