La Corte Suprema de Estados Unidos emitió una suspensión indefinida de la entrada en vigor de una rigurosa ley aprobada en Texas que autoriza la detención y posible expulsión de migrantes que crucen la frontera desde México de manera ilegal.
El juez supremo Samuel Alito dictaminó que la implementación de la norma se pospone hasta que él mismo o el tribunal emitan una nueva orden al respecto.
Esta decisión se produce en medio de una disputa legal entre el Departamento de Justicia de la administración de Joe Biden y el gobierno de Texas, liderado por Greg Abbott, republicano, quien ha sido acusado de exceder sus atribuciones al intentar ejercer control sobre las fronteras, competencia que corresponde al ámbito federal.
La ley, conocida como SB4, fue promulgada por Abbott en diciembre de 2023, después de su aprobación por el Congreso estatal. Se justificó en el derecho de Texas a defenderse de lo que calificó como una «invasión», en momentos en que los cruces de migrantes, particularmente de América Latina, alcanzan cifras récord.
Entre otras disposiciones, la norma autoriza a la policía y otras fuerzas de seguridad de Texas a arrestar a personas que no puedan demostrar haber cruzado la frontera de manera legal. Los detenidos podrían enfrentar penas de hasta 20 años de cárcel o ser expulsados a México, sin considerar la situación de este país para recibirlos.
El gobernador Abbott, aliado de Donald Trump, ha culpado a Biden del aumento en el fenómeno migratorio. Este tema podría ser crucial en las elecciones presidenciales de noviembre de 2024, donde Trump y Biden se perfilan como contendientes. Como parte de su estrategia, Abbott ha militarizado áreas como un parque en Eagle Pass, situado junto al río Grande, e inició la construcción de una base militar.
La decisión de la Corte Suprema ha sido bien recibida por México, cuya Cancillería celebró la suspensión temporal de la SB4. La canciller Alícia Bárcena destacó la importancia de abordar las causas estructurales de la migración en lugar de criminalizar a los migrantes.
Mientras tanto, grupos de defensa de los derechos de los inmigrantes como el Centro de Recursos Legales para Inmigrantes (ILRC) consideran que la suspensión ofrece un rayo de esperanza para las comunidades afectadas por la SB4, aunque advierten que la lucha continúa.
En la actualidad, miles de migrantes que cruzan hacia Estados Unidos se entregan a las autoridades fronterizas solicitando asilo. Muchos esperan una respuesta en libertad en territorio estadounidense.