En rechazo a las acciones que ha emprendido Israel contra Palestina, los gobiernos de Colombia y de Chile, en forma separada, convocaron este martes a reuniones a sus embajadores en Israel para analizar su situación diplomática.
La medida se anunció luego de que Bolivia se convirtiera en el primer país latinoamericano en romper relaciones con el gobierno de Tel Aviv.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, llamó a su embajadora en Israel este martes para discutir su postura en respuesta a la masacre de palestinos en Gaza, a menos de un mes del inicio de los enfrentamientos contra el grupo Hamás, refiere Telesur.
Petro tomó la decisión de convocar a su embajadora en el marco de la acción militar del Ejército israelí que afectó el campo de refugiados de Jabalia, donde se contabilizaban decenas de muertos y más de 150 heridos.
«Si Israel no detiene la masacre del pueblo palestino no podemos estar allá», dijo el mandatario en su cuenta de X.
Desde que comenzó el ataque, Petro ha sido firme en su oposición al asedio impuesto por Israel contra el pueblo palestino y a los bombardeos del país hebreo contra la población civil, afirmando que la humanidad está «frente a un genocidio».
Chile en contra
Este martes también se pronunció al respecto el presidente chileno, Gabriel Boric, y aseguró que Israel provoca «daños colaterales» al mundo..
En ese sentido llamó al embajador Jorge Carvajal, debido a «las inaceptables violaciones del Derecho Internacional Humanitario» cometidas por Israel en la Franja de Gaza, refiere el comunicado de Boric.
Además, subrayó que esto lo demuestran las más de ocho mil víctimas civiles, en su mayoría mujeres y niños. Desde la Cancillería se reiteró el llamado del país suramericano para un término inmediato de las hostilidades.
En su cuenta de X, Boric llamó a recordar que, según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), «420 niños están siendo heridos o asesinados diariamente en Gaza por el Estado de Israel dirigido por (Benjamin) Netanyahu».
Señaló que los menores, lejos de ser «daños colaterales» del conflicto, como dijeron funcionarios de Tel Aviv tras el ataque al campo de refugiados en Jabalia, «son sus principales víctimas, junto a civiles inocentes, principalmente mujeres», refiere Telesur.
