Las habilidades sociales son recursos importantes para abonar el terreno en la construcción de nuestro camino de vida.
Primero hay que definir que son las habilidades sociales, para no confundirlas. Según APA Dictionary of Psychology, son un conjunto de habilidades aprendidas que permiten a un individuo interactuar de manera competente y apropiada en un contexto social determinado.
Es decir, las habilidades sociales son herramientas que pueden ayudarte a hacer amigos, resolver problemas, mantener relaciones bajo control y hasta causar buenas impresiones.
Las más conocidas, o las más fáciles de identificar, son la asertividad, el afrontamiento, las habilidades de comunicación y la capacidad para entablar amistades.
También existen otras como la resolución de problemas interpersonales y la capacidad de regular las cogniciones, los sentimientos y el comportamiento.
Aquí te presentamos 5 habilidades sociales que te harán una personas más interesante.
Saber escuchar
Saber hablar fácil, pero saber escuchar es mucho más complicado. A las personas nos gusta ser escuchadas, ya que nos hace sentir que lo que edecimos es importante.
Además, la psicología afirma que las personas se sienten más atraídas a las personas que le prestan atención.
En el ámbito laboral las investigaciones de Izchakov y Kluger (2018) revelaron que desarrollar una cultura de comunicación basada en la escucha genera que los trabajadores se sientan más relajados, más conscientes de sus fortalezas y debilidades y más dispuestos a reflexionar de forma no defensiva.
Por otra parte, escuchar permite desarrollar otras habilidades como la empatía, lo que lleva a un mejor entendimiento y colaboración entre pares. Además, demuestra respeto, interés y confianza hacia el otro.
Dar un cumplido
Según el diccionario Larousse, un cumplido es un «acto de felicitar a alguien de algún mérito», de pronunciar «palabras de elogio o felicitación». Una afirmación, por tanto, muy positiva y que pone de relieve a la persona a la que va dirigida.
Según The Independent, dar un cumplido de forma respetuosa puede jugar a tu favor y te ayudará a que te perciban como una persona aagradable y atrativa.
Un buen cumplido toca un punto neurálgico de algunas personas que es el ego, lo que hace que se sientan valoradas y reconocidas.
Susan Krauss Whitbourne, profesora emérita de psicología de la Universidad de Massachusetts, un cumplido bueno, para ser considerado como tal, debe ser: «sincero, respetuoso, equilibrado y que no aporte ninguna ventaja evidente para quien lo hace».
Una buena forma de dar un cumplido es pedir ayuda a alguien más sobre algo que no sabes hacer, ya que esto le indica que consideras que es alguien inteligente.
Domina el contacto visual
El contacto visual se puede entender como la situación en la que las miradas de dos personas están fijas en los ojos del otro. Esta es una habilidad social realmente potente, siendo un claro caso de comunicación no verbal.
El intercambio de miradas y su interpretación están fuertemente asociados con la amígdala, una parte del cerebro relacionada con las emociones. Lo interesante del contacto visual es que se trata de un idioma sutil y contundente a la vez.
Por otra parte, el contacto visual puede ser muy seductor, además que también obliga a la otra persona a retribuirlo. De hecho, existe el llamado Método del Triángulo, que se basa en el contacto visual para la seducción, coquetear o ganarte a alguien.
La buena comunicación
El aspecto físico es lo primero que alguien nota de una persona, pero si es poco comunicativa, no servirá de mucho y la carroza se convertirá en calabaza.
Los seres humanos pasamos nuestra vida comunicando, y la forma de comunicar puede afectar tu visión y la que tienen de ti.
Contar una buena historia puede ser determinante para enganchar con cualquier persona, y esta es una habilidad que puede profundizar los vínculos que estamos empezando a tejer.
La importancia de la buena comunicación es tal que puede condicionar tu forma de pensar, de sentirte, y también de hacer sentir al otro.
Apertura
La apertura es simplemente mantener una mente abierta, es decir, tener la capacidad de comprender que uno no lo puede saber todo y que se puede aprender de las demás personas.
Esto evita que te veas como una persona necia, muy cerrada o incluso agresiva, además de que te puede ayudar a crecer y a desarrollar tu inteligencia, y eso siempre va a ser atractivo.
Por otra parte, mantener una mente cerrada puede hacerte más propenso a confrontarte con los demás y esto puede generar más negatividad. Si te mantienes con una mente cerrada, acabarás tendiendo hacia un grupo de amigos o personas que nunca cambiarán.
En cambio, al ser más abiertos podemos conocer a personas diferentes que pueden plantearnos nuevas experiencias u oportunidades.
