Las enfermedades coronarias continúan siendo una de las principales causas de muerte en el mundo de acuerdo a informes de la Organización Mundial de la Salud y aunque se considera que es un problema mayor para los hombres, puede acabar rápidamente con la vida de una mujer ya que los síntomas de infarto en ellas, son diferentes.
El síntoma más común es el dolor de pecho pero usualmente es una presión o una incomodidad que dura solo unos pocos minutos o una sensación que aparece o desaparece. Sin embargo, ya que el dolor no es intenso como suele ser en el caso de los hombres puede ser pasado por alto.
Las mujeres son más propensas a tener otros síntomas poco conocidos durante un ataque cardíaco que pueden ser:
- Molestias en el cuello, la mandíbula, los hombros o la parte superior del vientre (abdomen)
- Falta de aire
- Dolor en uno o ambos brazos
- Náuseas o vómitos
- Sudoración
- Aturdimiento o mareos
- Cansancio inusual
- Acidez estomacal (indigestión)
Como estos síntomas pueden ser confundidos con otros diagnósticos, es muy difícil llegar a la conclusión que están teniendo un infarto.
En comparación con los hombres, las mujeres pueden tener cualquiera de estos síntomas al estar en reposo o durmiendo. El estrés emocional puede ser uno de los factores que desencadenan el ataque cardíaco.
Las mujeres deben asistir al médico si sienten que están teniendo un infarto de forma inmediata, no acudir ellas mismas manejando ya que podría resultar fatal.
Algunos factores de riesgo para desarrollar enfermedades del corazón en las mujeres son: la diabetes, el estrés emocional, depresión, la inactividad, la menopausia y antecedentes de enfermedades cardíacas tempranas.
Todas las mujeres menores de 65 años con antecedentes familiares, deben prestar especial atención a los factores de riesgo de las enfermedades.
Algunos consejos para reducir el riesgo de este tipo de enfermedades son:
Dejar de fumar
Sigue un estilo de vida saludable
Haz ejercicio con regularidad
Controla otras afecciones médicas.
