La ruptura amorosa casi siempre genera angustia, y una sencilla herramienta emocional que puede ayudar es un cambio de imagen como gesto simbólico del inicio de esa nueva vida. Por eso el "corte de pelo post-ruptura" (breakup haircut) puede contribuir para retomar el control en los momentos de transición.
Hay que destacar que el término vuelve a la palestra cada vez que una celebridad aparece con una imagen renovada poco tiempo después de atravesar una ruptura. Los ejemplos son casi ilimitados.
Según la psicóloga, divulgadora y escritora María Esclapez no hay nada científico escrito, pero esa sensación de cerrar puertas y empezar nuevas etapas supone mucho movimiento interno y una sensación de descontrol muy grande.
“En esta dirección, uno de los cambios más inmediatos y perceptibles tiene que ver con la imagen exterior, y al modificarla se tiene la sensación de control, ya sea al decidir sobre los cambios físicos, o de habitación, es una manera de tener ese control otra vez".
Esclapez asegura que la medida es algo intergeneracional y sucede tanto a hombres como a mujeres.
"Simplemente, es una forma de canalizar esas emociones, y no tiene por qué ser siempre un corte de pelo, puede ser cambiar la música que escucho. Eso sí, cualquier cambio mucho mejor si es meditado, los impulsos no son buenos consejeros en esta situación”, concluye.