El próximo 14 de diciembre se reunirán el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro y su homólogo de Guyana, Irfaan Alí, en San Vicente y Las Granadinas, bajo el auspicio del presidente Ralph Gonsalves, presidente de la Comunidad del Caribe y un secretario de Naciones Unidad (CELAC).
En una carta, suscrita por Gonsalves, se invitó a los mandatarios a «la necesidad urgente de reducir la escalada del conflicto e instituir un diálogo apropiado, cara a cara, entre los presidentes de Guyana y Venezuela».
Este encuentro se produjo gracias a la mediación del presidente de Brasil, Luis Inácio Lula Da Silva, que exhortó a ambos países a encontrar una solución pacífica al problema limítrofe.
El territorio de la Guayana Esequiba abarca 160.000 kilómetros y es objeto de una reclamación por parte de ambos países, en una controversia histórica de más de 123 años y que se ha reavivado en los últimos meses.
El gobierno venezolano sostiene que no reconocen a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) y que las negociaciones deben regresar al Acuerdo de Ginebra firmando entre ambos países en 1966.
El presidente Maduro aseguró en su cuenta de X, que derrotarán «la mentira, las provocaciones y las amenazas».
Por su parte, el presidente Alí, radicalizó su postura y sostiene que se mantendran en la CIJ, que no aceptarán negociaciones y que eso no cambiará. «Estoy firme en que la controversia está ante la CIJ y no es para negociaciones y eso no cambiará», dijo el presidente guyanés.
Ambas posiciones mantienen en un tenso distanciamiento entre ambos países, que luchan por reclamar un territorio con un gran potencial minero en sus suelos y en la fachada atlántica.
«Venezuela agradece las gestiones por parte de Celac y Caricom para impulsar el diálogo directo de alto nivel con la República Cooperativa de Guyana a través de la reunión presidencial que se realizará el próximo 14 de diciembre», dijo el canciller venezolano Ivan Gil en su cuenta de X.
El pasado domingo 3 de diciembre se llevó a cabo un rederendum consultivo en Venezuela en el que triunfó la opción del «Si» en las cinco preguntas que se formularon a favor del reclamo y la defensa del territorio en la Guyana Esequiba.