Damian Oliver, ex jugador del Crystal Palace, decidió dejar a un lado su carrera en el fútbol profesional para dedicarse completamente al cine para adultos. Tras algunos meses frente a las cámaras, dijo que ser porno star, no es lo que la gente cree.
Hace poco, Damian participó en el podcast de James English llamado “Anything Goes” en el que afirmó: «Cuando jugaba en el Crystal Palace, si me hubiera quedado con ellos podría ganar más… ganaría más jugando al fútbol».
Oliver contó sobre su primera vez en el set, la catalogó como una de las experiencias más terroríficas que ha experimentado. El jugador dijo que apenas entró a escena llegó un camarógrafo, un hombre alto y calvo pero con mirada aterradora, que hizo de ese día, uno mucho menos cómodo.
«Era como un suelo laminado, y yo estaba desnudo y sudando, y me resbalaba con mi propio sudor. Tuvimos que seguir cortando, la tenía doblada sobre el sofá, pero yo seguía resbalando por todo el suelo”.
Por esa primera película, el ex atleta recibió un cheque por 170 euros, que lo dejó traumatizado y acabó siendo una experiencia completamente aterradora.
A pesar de ser una estrella prometedora en el fútbol, Damian decidió seguir este camino aún cuando podía cambiar de deporte. El musculoso joven confirmó que también podría haber sido luchador y que si hubiera decidido irse por esa rama le podría haber resultado un poco mejor en lo económico.
El tema es que su gusto por las mujeres primó de al manera, que cuando recibió la propuesta de hacer su primera película no lo pensó dos veces. Disfrutaba mantener relaciones con mujeres así que si lograba seguir haciendo eso, sería un sueño que le pagaran por eso. El joven nunca pensó es que los detrás de cámara son peores de lo que cualquiera se imagina.
Ahora, el actor mantiene una relación con la también actriz porno Sophie Anderson y a pesar que entre los dos se apoyan lo suficiente seguir en la industria, Oliver admite: «Sinceramente, ser futbolista es mejor que ser actor porno. Si hubiera seguido en el fútbol, hoy sería mucho más rico, y mucho más feliz».
