Europa es testigo de una crisis en la Federación Española de Fútbol (RFEF), por la renuncia de 15 jugadoras de la selección femenina absoluta por discrepancias con los métodos de trabajo del técnico Jorge Vilda, así lo informó este jueves la RFEF.
Las 15 integrantes de la selección le enviaron un correo a la institución en el que presentan su renuncia al equipo nacional mientras siga al frente el seleccionador Jorge Vilda, con el que han tenido diferencias desde que finalizó la pasada Eurocopa 2022, cuando cayeron en cuartos de final frente a Inglaterra.
Las diferencias con Vilda, según las jugadoras, afectan de forma importante en su "estado emocional" y en su "estado de salud" por lo que decidieron dejar la selección "mientras no se revierta" la ratificación del entrenador.
"Debido a todo ello, actualmente no me veo en condiciones de ser jugadora seleccionable para nuestro equipo nacional y por este motivo solicito no ser convocada hasta que esta situación no sea revertida", reza un fragmento de los polémicos correos redactados de forma similar por las 15 jugadoras.
Por su parte, la Federación reaccionó con un contundente comunicado en el que afirman que no van a amparar a ninguna jugadora que "cuestione la continuidad del seleccionador nacional y de su cuerpo técnico, pues tomar esas decisiones no entra dentro de sus competencias".
El presidente de la RFEF, Luis Rubiales, también se pronunció en rechazo a la renuncia masiva de las jugadoras, ya que considera que esas maniobras están alejadas "de la ejemplaridad y fuera de los valores deportivos".
A inicios de septiembre las capitanas Irene Paredes, Patri Gijarro y Jenni Hermoso se dirigieron a los directivos de la federación para manifestar su descontento, y cuestionar la forma de trabajar de Vilda, por lo que consideran que no es el entrenador idóneo para pelear por los títulos.
La reacción del entrenador Jorge Vilda, no se hizo esperar, y declaró en rueda de prensa, "tengo un sentimiento de decepción y estoy dolido por la forma de proceder", consideró que los asuntos que se discuten en el vestuario deben mantenerse en el vestuario.
Hasta ahora se conoce que la Federación sólo aceptará el posible regreso de las jugadoras que renunciaron, "si asumen su error y piden perdón".
