“Cuando volví a casa en Oregon, no podía dejar de pensar en la clase magistral de tres horas sobre la confianza y el orgullo de lo que ha conseguido (…) y me gustó. Creo que a la mayoría de los presentes en el Estadio Allegiant también”, compartió en una columna la escritora y corredora estadounidense, Emily Halnon.
«Me hacen sentir como si fuera la primera mujer en encabezar el Estadio Allegiant», dijo la cantante, en medio de su concierto en Las Vegas. Esta aseveración hizo que los aplausos fueran ensordecedores aunque para la escritora, en un primer momento, fue una declaración poco humilde.
Luego, lo pensó mejor y descubrió que Swift sólo expuso sin remordimiento su éxito mientras paseaba por el escenario con un body de lentejuelas y botas a juego.
“La frase me dejó anonadada y envió un poderoso mensaje a las decenas de miles de mujeres asistentes sobre cómo abrazar el éxito”, escribió Halnon quien el fin de semana siguiente vió un fragmento de la actuación de Swift en el AT&T Stadium, sede de los Dallas Cowboys, dónde repitió el mensaje de logro: «soy la primera artista que actúa tres noches en este estadio».
“La vi contonearse, con la cara llena de alegría mientras agitaba las caderas ante decenas de miles de personas, y esta vez no me acobardé. Pensé en cómo puedo parecerme un poco más a Swift la próxima vez que consiga un triunfo”, remató la escritora.