Tras siete horas de discusión, la Comisión de Seguridad Social, Asistencia Social, Niñez, Adolescencia y Familia (CPASF) de Brasil decidió posponer la votación para decidir si se modifica el Código Civil y se prohíbe el matrimonio homoafectivo (igualitario). La derecha local hace todo lo posible para prohibir la unión entre personas del mismo sexo.
La noticia fue tomada como «una victoria parcial». Un nuevo texto será formulado y votado el 10 de octubre próximo.
El resultado es el segundo intento de discusión. «El pronóstico era terminar el trabajo hoy, pero la próxima fecha establecida por el colegiado es el 10 de octubre», publicó el diario Oglobo.
Según el relator de la propuesta, diputado Pastor Eurico (PL), hubo acuerdo con diputados más alineados a la izquierda.
Analistas habían comentado la posibilidad de que el proyecto fuera aprobado por la Comisión, ya que está compuesta en su mayoría por parlamentarios de extrema derecha.
La diputada transgénero Duda Salabert (PDT-MG) señaló que el proyecto es inconstitucional y afirmó que, aunque sea aprobado por el CPASF, no podrá avanzar en comisiones como la de Constitución, Justicia y Ciudadanía (CCJC). “Nosotros en la comunidad LGBT no tenemos preocupaciones políticas sobre este proyecto porque es inconstitucional y tiene varias aberraciones legales. Nunca, jamás en la historia de este país se aprobará este proyecto”, garantizó.
Para Duda, es una cortina de humo para esconder asuntos que realmente importan. “Prefieren discutir un tema inconstitucional, gastar dinero público, en el que nada mejorará la calidad de vida de los brasileños, ya sean evangélicos, agnósticos, conservadores, liberales, comunistas, anarquistas, lo que sean. Por el contrario, este debate es perturbador porque fomenta el discurso de odio y la intolerancia», dijo la diputada.