Este martes 6 de septiembre un fuerte tifón azotó las costas de Corea del Sur y dejó, hasta ahora, 2 muertos, 10 desaparecidos y más de 66.000 viviendas sin electricidad, así lo informó la agencia AP.
Autoridades de Corea informaron que el tifón “Hinnamnor”, el más fuerte que ha impactado en las península coreana en muchos años, descargó un metro de lluvia y causó grandes estragos en carreteras y los tendidos eléctricos.
El evento meteorológico rodeó la isla Jeju, un reconocido lugar de veraneo, sin daños que lamentar y llegó a tierra firme por la ciudad de Busa, un famoso puerto comercial coreano.
Sin embargo, la preparación de la población para esta eventualidad hizo posible que las víctimas consecuencia de las fuertes lluvias no fueran mayores. Los planes de evacuación de las zonas de riesgo fueron exitosos pese a que no se esperaba que el tifón arremetiera con tanta fuerza.
Los bomberos circundaron las zonas afectadas en botes de goma para tratar de rescatar a las personas que se mantenían en los lugares afectados. De igual forma, las autoridades habían ordenado el cierre de más de 600 escuelas como medida preventiva.
Los fallecidos fueron una mujer de 70 años de Pohang, arrastrada por las inundaciones repentinas y otro hombre que no se ha identificado, que cayó a un arroyo crecido por las lluvias en la ciudad de Ulsan, según informó el Ministerio de Interior y Seguridad.
Los pronósticos climatológicos proyectaron que el tifón seguirá con dirección a China, al que llegará con menos fuerza aunque igual representará peligro para las costas del gigante asiático.
