El futbolista senegalés Sadio Mané se casó con una joven de su país, Aïsha Tamba, con quien «mantenía un vínculo fuera de los ojos de los medios» y que apenas si es mayor de edad.
«La relación es un misterio e incluso disparó diferentes interrogantes en Europa por las preguntas ante el vínculo de la estrella del fútbol de 31 años con su flamante esposa», publicaron los diarios locales.
En África aseguran que la celebración fue “lujosa” en Keur Massar. Además, comentan que la novia destaca por su compromiso con la fe musulmana.
La diferencia de edad ha sido un enfoque que realizaron los principales diarios de Europa, aunque ante la poca información en torno a Aïsha tampoco hay verdaderas precisiones de esto, más allá que la mayoría coincide que tiene 18 o 19 años.
«Se cree que Aïsha Tamba es la única hija de sus padres y su padre reveló que su hija y la estrella de Al-Nassr generalmente se comunicaban tradicionalmente mediante cartas”, aseguró el diario local Pulse sobre Tamba que estudió en un instituto privado en Mbao.
El propio presidente del país, Macky Sall, se refirió al suceso: “quiero felicitar calurosamente a nuestro Sadio Mané, que acaba de casarse. Le he llamado para darle un aplauso y desearle un feliz matrimonio. Que Dios bendiga su hogar y a sus descendientes”.
El jugador que fue visto por un cazatalentos en 2009 e inició su carrera profesional en el Metz de Francia, luego pasó por Red Bull Salzburgo de Austria, Southampton de Inglaterra antes de dar el salto clave al Liverpool de la Premier League donde brilló durante seis temporadas previo a marcharse al fútbol de Arabia Saudita. Días atrás fue noticia por la obra solidaria que encabezó en su tierra, Bambali, donde jugó un partido con amigos e inició la construcción de un estadio.
En 2022, Mané dio una entrevista a “Tribune” y explicó que “he visto a muchas chicas preguntándome por qué no estoy casado, pero lamento que puedan estar perdiendo el tiempo. La mujer con la que me case no estará en las redes sociales. Quiero casarme con una mujer que respete a Dios”, expresó por entonces en un medio que reflejó que Mané tiene “presencia muy baja en redes sociales”.
El jugador no tiene cuenta en la red social X (anteriormente Twitter), no bebe y “raramente” asiste a fiestas.