La ministra del Interior del Reino Unido, Suella Braverman, anunció la compra de tiendas de campaña para albergar a migrantes y de esta forma sustituir el alojamiento en hoteles que el gobierno considera demasiado costoso. La semana pasada fue un escándalo la información sobre el barco con migrantes indocumentados.
Las organizaciones sociales califican de «cruel» la iniciativa en medio de críticas internacionales.
El gobierno británico compró carpas para alojar hasta 2.000 migrantes que lleguen al país de forma irregular a través del Canal de la Mancha, en una decisión que busca ahorrar dinero, informó el diario The Times.
«El Ministerio del Interior adquirió estas tiendas de campaña que serán armadas en antiguos emplazamientos militares como respuesta a un pronóstico que anticipa un incremento en los cruces de inmigrantes en los próximos tres meses», publicó el medio.
Datos oficiales indican que este año cruzaron el Canal de la Mancha en embarcaciones precarias más de 12.500 personas, mientras que a lo largo de 2022, se registraron más de 45.000 travesías, una cifra récord.
El Gobierno adquirió también dos barcazas para alojar a los solicitantes de asilo y se espera que las primeras 50 personas aborden la primera de ellas la semana que viene
El objetivo del nuevo plan es sustituir el alojamiento en hoteles, que el gobierno considera demasiado costoso, mientras que el sistema de asilo no da abasto con las solicitudes presentadas y la falta de medios asignados.
Según el Times, algunos miembros del Gobierno compararon la solución de las carpas con los campos de concentración, lo que generó aún más controversia en torno a este tema.
Para el primer ministro Rishi Sunak, la detención de las travesías en el Canal de la Mancha es una de sus prioridades de su Gobierno.
El Gobierno adquirió también dos barcazas para alojar a los solicitantes de asilo y se espera que las primeras 50 personas aborden la primera de ellas la semana que viene.
La situación se complica aún más tras una sentencia judicial reciente que prohíbe alojar a niños inmigrantes no acompañados en hoteles de forma fija.
«No hay nada de malo en este tipo de alojamiento temporal cuando es necesario. Otros países también lo usan», subrayó esa fuente.
La situación se complica aún más tras una sentencia judicial reciente que prohíbe alojar a niños inmigrantes no acompañados en hoteles de forma fija.