Unos pescadores argentinos encontraron los restos de un hombre dentro del estómago de un tiburón cazón.
Se trataría, por los tatuajes que aún se veían en la piel, de Diego Barría, quien salió de su casa el pasado 18 de febrero para practicar cuatriciclo, no regresó a su casa y sus familiares lo denunciaron como persona desaparecida.
Los pescadores lograron distinguir entre los restos un tatuaje de color rosa, verde y roja con una inscripción que quedó ilegible.
De acuerdo a medios locales, Barría paseaba por la zona de Rocas Coloradas, un sitio pesquero al norte de Comodoro Rivadavia. Tras unos días de búsqueda, localizaron su casco y su vehículo con graves daños de carrocería por lo que se piensa que el hombre sufrió un accidente.
La comisaria encargada del caso, Daniela Millatruz, declaró el hallazgo de las pertenencias del occiso y que las labores para su rescate aún no terminan.
«Puede haber salido caminando o que lo haya agarrado la marea, teniendo en cuenta que el mar arrastró el asiento y lo dejó en la costa» añadió la comisaria.
Además, la pareja de Diego, llamada Virginia le escribió una carta a través de Facebook en la que le pedía que regresara o que le diera alguna señal para conseguirlo y agradeció a todas las personas que estaban participando en la búsqueda de su esposo.
Todo esto resultó ser en vano ya que a los días los investigadores recibieron la llamada de los pescadores de Caleta, quienes informaron el descubrimiento de los restos dentro del tiburón. «Me dio por abrirle la panza al tiburón y encontré un antebrazo con un tatuaje» contó el pescador.
Tras descubrir los restos, éstos fueron llevados a la Morgue Judicial en donde iniciarán las investigaciones ya que las autoridades no descartan un accidente o incluso un homicidio.
“Mi corazón se fue con vos! Te amo para siempre”, lo despidió su esposa en las redes.
