Este lunes, la exasesora de la Casa Blanca, Amy Pope, se convirtió en la primera mujer en ser elegida como directora general de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que actúa como entidad de ayuda humanitaria para las personas en situación de crisis migratoria.
Pope, de 49 años, se desempeñó como directora general adjunta de Gestión y Reforma de la organización hasta el 2022, cuando se ausentó para iniciar su campaña con el objetivo de competir con su jefe, António Vitorino, quien ocupaba el cargo principal desde 2018.
‘’Me siento honrada por haber sido escogida como la siguiente directora general de @UNmigration. Estoy lista para trabajar junto a todos los Estados miembros y compañeros globales para aprovechar las oportunidades que brinda una migración efectiva, ordenada y humana’’, escribió la ejecutiva en su cuenta oficial de Twitter.
Por su parte, el secretario de Estado, Anthony Blinken, escribió en un comunicado que: ‘’Como el donante bilateral más grande de la OIM, Estados Unidos apoya firmemente la visión de Pope y espera trabajar con ella para implementar las reformas críticas necesarias para crear una OIM más efectiva e inclusiva’’.
En 2021, Pope fue asesora sobre migración del presidente de EEUU, Joe Biden, quien respaldó su candidatura.
La nueva responsable asumirá el próximo 1 de octubre y por un periodo de cinco años, el cargo que le ha confiado el Consejo de la OIM.
Más de 100 millones de personas han sido desplazadas forzosamente en todo el mundo, por lo que el objetivo de la OIM es garantizar una migración humana y ordenada.
