Este martes, el fabricante japonés de vehículos, Nissan Motor, anunció la venta de todos sus activos en Rusia a una entidad estatal de ese país, luego de haber suspendido el pasado mes de marzo sus negocios en el mercado ruso debido a la guerra entre Ucrania.
La operación, la cual fue aprobada por el Comité Ejecutivo de Nissan, significará el traspaso de los negocios en Rusia al Instituto Central de Investigación y Desarrollo de Automóviles y Motores (NAMI), así lo indicó el fabricante japonés en un comunicado.
"Los activos rusos de Nissan Manufacturing Rus se convertirán en propiedad del Estado", señaló el Ministerio de Industria y Comercio. La venta incluye una fábrica de Nissan de San Petersburgo (noroeste), la cual estuvo paralizada desde marzo, y un centro de venta y marketing en Moscú.
Bajo la nueva propiedad de la fábrica, todos los empleados de Nissan recibirán una protección laboral de 12 meses. Por esto, el presidente y CEO de Nissan, Makoto Uchida, agradeció a los trabajadores de Rusia por su ‘’contribución a la empresa durante muchos años’’ y señaló que la venta supone ‘’la mejor solución’’ teniendo en cuenta que la compañía no puede continuar operando en el mercado ruso.
La empresa ya había anunciado el pasado mes de marzo la suspensión de su producción en Rusia por los problemas de suministro y a las sanciones por la guerra contra Ucrania, aunque, posteriormente, anunciaron que continuarían suspendidos hasta finales de este año.
Los términos de la venta darán a Nissan la opción de recomprar la entidad y sus operaciones en los próximos seis años, dijo la empresa japonesa, dejando abierta la posibilidad de un regreso al país.
La salida del mercado ruso de Nissan, supondrá un beneficioso impacto de aproximadamente 707 millones de euros, así lo indicó la empresa, la cual no dio más detalles del monto de la transacción.
Nissan espera que la operación culmine en las próximas semanas, esto una vez reciba el visto bueno de las autoridades.
