El Fondo Monetario Internacional (FMI) rebajó sus pronósticos para la economía mundial este martes y señaló “el reciente aumento en la volatilidad de los mercados financieros”, debido a la crisis bancaria mundial.
Según el pronóstico, se espera que el crecimiento económico se desacelere 0.6% en comparación con el año anterior, ya que en 2002 se ubicó en 3,4% y para 2023 se prevé en 2,8% en 2023, la estimación en enero había sido de un crecimiento del 2,9% este año.
“La incertidumbre es alta, y el balance de riesgos se ha desplazado firmemente a la baja mientras el sector financiero permanezca inestable”, dijo la organización en su más reciente informe.
Pese a tener un pronóstico, el mismo cambió debido al colapso en el mes de marzo de Silicon Valley Bank y Signature Bank, dos prestamistas regionales de Estados Unidos (EEUU), y la pérdida de confianza en Credit Suisse.
La inflación mundial, que según el FMI estaba demostrando ser “mucho más rígida de lo previsto”, se espera que caiga del 8,7% en 2022 al 7% este año y al 4.9% en 2024.
De manera que ante la vulnerabilidad del sector financiero, los inversores buscan focos adicionales y los prestamistas pudieran volverse más conservadores para preservar el efectivo que pueden necesitar para lidiar con un entorno impredecible.
Además, informó que es probable que las tasas de interés en las economías avanzadas vuelvan a sus niveles previos a la pandemia, una vez que haya pasado el período actual de alta inflación.
Este pronóstico se acerca al emitido por el Banco Mundial. Reuters, refiere que David Malpass, presidente saliente de esta institución financiera, dijo a periodistas este lunes que el grupo ahora vio una expansión de 2% en la producción en 2023, frente al 1,7% pronosticado en enero.