Francia no permitirá que sus atletas lleven el velo islámico durante los Juegos de París del año próximo, pese a que el Comité Olímpico Internacional (COI) lo tolera, indicó este martes la ministra de Deportes, Amélie Oudéa-Castéra.
«Los representantes de nuestras delegaciones y en nuestros equipos no llevarán el velo» dijo, por el respeto a la laicidad que hay en su país. Reconoció que esa decisión es contraria a la doctrina del COI (que aborda esta prenda como un aspecto cultural y no religioso), publicó el Diario ABC.
Hay que recordar que la ley francesa no prohíbe de forma explícita el velo en las competiciones deportivas, aunque sí lo hace a los representantes públicos en el ámbito de sus funciones.
La prohibición genérica del velo islámico incluye este tipo de velos: burka (cubre todo el cuerpo y la cara, con una rejilla a la altura de los ojos), niqab (tapa el rostro y solo deja los ojos al descubierto), hijab (cubre la cabeza y el cuello), chador (manto cubre todo el cuerpo), shayla (velo largo enroscado en el cuello), al amira (velo de dos piezas), khimar (capa que cubre velo, cuello y hombros), abaya (túnica completa).
«Cada federación, que se rigen como entidades privadas, toma sus propias decisiones en lo referente al velo. Las de fútbol o baloncesto lo prohíben, mientras que las de rugby, balonmano o tenis lo autorizan bajo ciertas condiciones», publicó el medio.
Sin embargo, un portavoz oficial de la ONU sentenció que «nadie debe imponer a una mujer la prenda que ella puede o desea usar, libremente. De manera general, el Alto comisariado de los derechos del hombre se opone a cualquier prohibición de los distintos velos islámicos«. Menos rígido, en su día, el COI había hecho suya esa doctrina oficiosa.