Un terremoto de 6.8 grados en la escala abierta de Ritcher, se produjo en la parte sureste de Taiwán. Según la Oficina Central de Meteorología de la isla, el fuerte movimiento telúrico se produjo a las 14.44 hora local (6.44 GMT) y el epicentro del sismo se situó a 42,7 kilómetros al norte de Taitung, con unos 7 kilómetros de profundidad.
La Agencia Nacional de Bomberos de Taiwán ha reportado, hasta el momento, una víctima fatal y más de 79 heridos que han sido recatados de edificios derrumbados, trenes descarrilados y carreteras colapsadas. Sin embargo, unas 600 personas, muchas de ellas turistas, están atrapadas en las zonas montañosas.
Por su parte, la presidenta Tsai Ing Wen, ha elevado el nivel de alerta en la isla para hacer frente a las continuas réplicas y minimizar los daños ante el posible colapso de puentes, edificios e infraestructuras urbanas.
El terremoto estuvo precedido por una serie de temblores que se registraron durante las últimas horas y ya habían alertado a la población.
La Agencia Meteorológica de Japón y el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico emitieron alertas poco después del terremoto, pero ambas fueron levantadas al determinarse que no existen amenazas.
Taiwán se asienta en la confluencia de las placas filipina y eurasiática, por lo que los terremotos son frecuentes en la isla.