Ghislaine Maxwell, la británica y miembro de la alta sociedad que en su tiempo se asoció con miembros de la realeza, presidentes y multimillonarios, fue condenada este martes a 20 años de prisión tras ser declarada culpable por múltiples cargos de tráfico sexual y captación de menores, los cuales fueron abusados sexualmente por su expareja, el difunto multimillonario Jeffrey Epstein.
En el juicio, Maxwell reveló que el mayor arrepentimiento de su vida fue haber conocido a Epstein, luego de llamarlo un hombre manipulador, astuto y controlador y aunque niega haber abusado de alguien en su pasado, la jueza Alison J. Nathan se negó a permitir que Maxwell escapara de la culpabilidad, dando a entender que estaba siendo castigada por sus propios actos y no por los de su expareja.
“El estado de derecho exige, y este tribunal está de acuerdo, que ya seas rico, poderoso o completamente desconocido, nadie está por encima de la ley”, indicó Nathan durante la sentencia en la cual también impuso una multa de 750.000 mil dólares -el máximo legal-.
En los últimos años, decenas de mujeres han acusado directamente a Epstein de abusar de ellas y a Maxwell por reclutarlas y luego persuadirlas para quedarse a solas con su pareja. En el juicio, cuatro mujeres testificaron que fueron abusadas en la década de 1990 y a inicios de la década de los 2000 en las mansiones del magnate, se constató que Maxwell las cautivaba con regalos y promesas de que Epstein podía ayudarlas a cumplir sus sueños gracias a su riqueza y contactos, ofreciéndoles también viajes en jets privados, helicópteros, limosinas y una alta remuneración por sus servicios para luego llevarlas a una habitación donde debían darle masajes al magnate, que finalizaban en abusos sexuales.
Tres mujeres fueron presentadas en la corte con seudónimos para proteger su identidad: Jane, actriz de televisión; Kate, ex modelo del Reino Unido y Carolyn, una madre que se recupera de la adicción a las drogas. La cuarta mujer fue Farmer, la única que se identificó con su nombre real.
Antes de que se anunciara el veredicto final, Maxwell bajó la mirada mientras Sarah Ransome -una de las acusadoras- hablaba sobre el daño permanente provocado por la pareja. Ransome, quien dos veces trató de suicidarse, consiguió la mirada de Maxwell cuando argumentó: ‘’ Me rompiste de maneras insondables, pero no rompiste mi espíritu’’.
El caso de Maxwell animó al movimiento MeToo a hacer públicos los abusos sexuales que han sufrido algunas mujeres por parte de hombres millonarios y poderosos.
Acusaciones contra Epstein
Las acusaciones contra Epstein emergieron por primera vez en 2005, declarándose en 2008 culpable de cargos sexuales en Florida por los que cumplió 13 meses en la cárcel y por lo cual se le solicitó que se registrara como delincuente sexual. Sin embargo, en 2009, la fiscalía de Nueva York presentó nuevos cargos y quedó al descubierto el trato que realizó el acusado en el pasado para evitar que se le imputarán cargos federales que habrían culminado en una cadena perpetua.
Como señalan las acusaciones, el magnate buscaba adolescentes menores de edad y les pagaba por masajes que en la mayoría de los casos terminaba en un abuso sexual en sus residencias de Florida, Nueva York, Nuevo México y las Islas Vírgenes.
Epstein fue detenido a inicios de julio al regresar en su jet privado de un viaje a Europa, y fue trasladado al Metropolitan Correctional Center (MCC), un penal que alberga a las personas que esperan juicios o sentencias en la corte federal.
El 10 de agosto de 2019, el personal de la cárcel federal ubicada en Manhattan, halló a Epstein inconsciente en su celda. El magnate que se enfrentaba a 45 años de cárcel fue trasladado con un paro cardíaco a un hospital del centro de la ciudad, donde confirmaron su muerte.