Aunque la entrevista pautada en Twitter se interrumpió cerca de 20 minutos, finalmente el gobernador de Florida, Ron DeSantis, pudo anunciar su candidatura y ya es un hecho: se inscribió hoy como aspirante a la Casa Blanca.
El sonido del evento de transmisión en vivo, que se llevó a cabo en Twitter Spaces y fue presentado por el propietario Elon Musk y el empresario tecnológico David Sacks, se interrumpió en los primeros minutos después de comenzar.
“Tenemos tanta gente aquí que estamos derritiendo los servidores”, dijo Sacks en un momento dado.
Más de 500.000 usuarios de Twitter se unieron al evento, que finalizó y luego se reinició, lo que retrasó el anuncio de DeSantis casi media hora.
Horas antes el gobernador de Florida, Ron DeSantis, presentó la documentación para postularse a la presidencia ante la Comisión Federal de Elecciones
El lanzamiento acerca públicamente al político con una de las personas más ricas del mundo: una figura polarizadora que comparte el desdén de DeSantis por los medios y los críticos liberales y se ha convertido rápidamente en una de las voces más prominentes y provocadoras de la derecha.
Twitter se ha enfrentado a una variedad de interrupciones y problemas técnicos desde que Musk se hizo cargo de la plataforma a fines del año pasado. Poco después de adquirir la empresa, Musk despidió a una gran cantidad de personal técnico y de otro tipo y redujo la capacidad del servidor de Twitter en un esfuerzo por reducir costos.
Muchos republicanos lo ven como el desafío primario más formidable de 2024 para Donald Trump.
Analistas consideran que el gobernador de Florida trata de recuperar el equilibrio después de quedarse muy por detrás de Trump, incluso cuando ha mantenido un control claro en el segundo lugar.
DeSantis, de 44 años, se convirtió en una estrella del Partido Republicano como gobernador de primer mandato que se burló de los cierres provocados por la pandemia y los mandatos de vacunas y se presentó a sí mismo como un enemigo de lo que él llama «ideología despierta» en los medios de comunicación.
Su aplastante reelección en noviembre contrastó con el desempeño decepcionante de los republicanos en todo el país.
Desde entonces, ha impulsado la política de Florida hacia la derecha con medidas enérgicas contra los inmigrantes indocumentados, una nueva y estricta prohibición del aborto y otras medidas dramáticas que han hecho que su candidatura sea particularmente alarmante para los demócratas y algunos líderes de derechos civiles.
DeSantis ha señalado que hará campaña por su enfoque combativo hacia los críticos y su disposición a profundizar en algunos de los debates más polarizantes del país.
Otros aspirantes a 2024 están tratando de posicionarse como la principal alternativa de Trump si DeSantis continúa perdiendo fuerza. La ex embajadora de la ONU Nikki Haley, el ex gobernador de Arkansas Asa Hutchinson, el senador Tim Scott y candidatos menos conocidos ya han declarado campañas, mientras que otros, como el ex vicepresidente Mike Pence, también podrían unirse a la carrera.
Por el lado demócrata, el presidente Biden anunció oficialmente que se postulará para la reelección en 2024 . La autora Marianne Williamson y el defensor de las vacunas Robert Kennedy Jr., ambos candidatos con posibilidades remotas, también buscan la nominación demócrata.
