El gobierno de Colombia inició la entrega de un bono monetario no condicionado a 30.000 familias con niños y niñas en primera infancia o madres gestantes, de las comunidades wayuu, en el norte de la Guajira.
«La medida, que servirá para mitigar la crisis, se adopta en el marco del Estado de Emergencia Económica, Social y Ecológica que fue declarado en ese departamento», reseñó la prensa local.
El presidente Gustavo Petro anunció en su Twitter la medida.
“Buscamos garantizar a estas familias los recursos para acceder a una canasta básica de alimentos, y mitigar la situación de desnutrición y de hambre en el departamento”, dijo Yohanna Cubillos, directora de Transferencia Monetarias de Prosperidad Social.
El Gobierno invertirá en esto cerca de 3.400.000 dólares.
“Toda la intervención respetará sus creencias y sus costumbres, y permitirá superar la situación de hambre y desnutrición (…) no en todas las comunidades hay capacidades de llegar a los puntos de pago. Unas zonas requerirán cajas especiales; otras, medidas de pago particular, que debemos diseñar con cuidado”, dijo Cubillos.
El gobierno nacional y comunidades originarias han trabajado esas transferencias conjuntamente: las salidas a territorio son acordadas de manera conjunta y se elaboran planes comunitarios étnicos para promover que los recursos se utilicen para el fin que se están entregando. El gobierno del presidente Petro busca promover ecosistemas alrededor de las transferencias, para que los días de pago haya mercados y dinámicas de las economías populares y locales.