El gobierno ultraderechista de Giorgia Meloni en Italia, pidió acciones contra la inmigración tras la visita de Von der Leyen a la isla de Lampedusa
«Traducir las palabras en hechos». Demanadaba el presidente de Forza Italia, uno de los partidos de la cualición ultraderechista que gobierna el país, tras la visita de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen. Esta buscaba dar imagen de unidad en la «respuesta europea» a la inmigración irregular.
El viaje de la presidenta ha sido recibido con optimismo moderado por el gobierno italiano, que pedía más mano dura a Bruselas, con repatriaciones y no una mera distribución entre los 27.
“No considero esta visita como un gesto de solidaridad de Europa hacia Italia, sino más bien como un gesto de responsabilidad de Europa hacia sí misma, porque estas son las fronteras de Italia, sin duda, pero también son las fronteras de Europa», aseguraba este domingo la primera ministra italiana, Giorgia Meloni.
Medidas
Von der Leyen enumeró un paquete de 10 medidas en este momento de emergencia migratoria, que incluyen la actualización de la legislación europea contra el tráfico de personas (una demanda del Gobierno italiano) y campañas de sensibilización en los países de origen para evitar que las personas intenten cruzar el Mediterráneo.
La llegada irregular de personas al país se ha duplicado este año con respecto a 2022. Más de 127.000 inmigrantes han llegado a Italia cruzando el Mediterráneo.
El Buque Geo Barets, de Médicos Sin Fronteras, rescató entre el sábado y el domingo a más de 471 inmigrantes, entre los que viajaban 205 menores, durante once misiones de salvamento coordinadas con las Autoridades italianas, que han asignado el puerto de Brindisi (en el sur de la península) para su desembarco.
También la nave Diciotti, de la Guardia Costera, llegó al puerto de Reggio Calabria (sur) con 700 migrantes rescatados en otra serie de operaciones.
Meloni había anunciado un paquete de medidas para disuadir a los migrantes que traten de llegar de forma irregular a Italia, entre ellas, la de ampliar hasta los 18 meses, el máximo que permite la ley, el periodo de internamiento en los centros de detención de las personas que esperan la repatriación.
Presión migratoria
También los ministros de interior de Italia, España, Francia, Alemania mantuvieron una conversación telefónica con la comisaria europea, Ylva Johansson, para abordar la presión migratoria en las costas del Mediterráneo, especialmente tras las llegadas masivas a Italia de los últimos días.
«Necesitamos dar el máximo impulso político para llevar a cabo una nueva estrategia operativa contra la trata de seres humanos que finalmente tenga como objetivo implementar iniciativas concretas destinadas a bloquear las salidas en origen”, declaró el titular de Interior, Piantedosi, en un comunicado.
Con las cifras en constante evolución, en lo que va de año han desembarcado en Italia 127.207 inmigrantes, casi el doble que los 66.237 del mismo periodo del 2022 y el triple que los de 2021 (42.750), según los últimos datos actualizados por el Ministerio del Interior.
Fuente: Euro News